Comaja fue fundada en 1974 por un grupo de maestros con necesidades económicas, quienes acordaron fundar una cooperativa de ahorro y crédito. Al día de hoy cuentan con una amplia trayectoria de 48 años.
Con el paso del tiempo ganaron más popularidad, razón por la que su interna se transformó. Antes eran una cooperativa con vínculo social cerrado, pero al ver el creciente interés de profesores y funcionarios públicos de unirse, optaron por abrirse e integrar a más gente.
Cualquier persona con domicilio fijo y deseo de participar en el trabajo cooperativo es bienvenida y con tan solo pagar la cuota mensual ya se convierte en miembro. Además, esta cooperativa es de operatoria cerrada ya que solo trabaja con pesos uruguayos y no recibe depósitos de dinero como lo hace una financiera.
El capital de Comaja se genera con el ingreso que los socios otorgan mensualmente y también con las ganancias de los préstamos. La cuota mensual de la cooperativa es de 95 pesos uruguayos de los que el 40 por ciento va destinado al Servicio de Asistencia Social (SAS) y el porcentaje restante pasa a integrar el capital social de cada uno. Cabe destacar que ese capital se devuelve cuando el socio se retira.
“Comaja cuenta con independencia y autonomía porque trabaja con capital propio, tiene buena solidez y fluidez financiera. No tiene deudas pendientes, tampoco acepta ni recibe inversiones de socios. Basta tan solo con el aporte mensual que es supervisado por la Auditoría Interna de la Nación (AIN) y también auditores externos que son contadores que conforman parte del Instituto del Desarrollo Cooperativo del que es fundadora también”, explicó Medina.
Si hablamos de las SAS, este es un servicio muy amplio que presenta Comaja. Se cuenta con el préstamo de un salón para cualquier tipo de evento, desde una conferencia hasta una presentación de un libro, incluso puede prestarse a un Instituto que requiera espacio para realizar cursos. Este espacio es libre y gratuito. Éste también cuenta con la parte de educación cooperativa mediante CEFIC, asimismo este no es electo sino que lo nombra el Consejo y es el encargado de la parte educativa.
Comaja ofrece también otro tipo de ayudas, principalmente con la situación de emergencia sanitaria actual. Han ofrecido mucha ayuda a comedores populares, además realizan 10 sorteos entre los socios que estén al día, así como también entregan presentes por el día del trabajador, del abuelo, madre o padre incluso.
Sumado a esto, la cooperativa apoya fielmente el deporte, donde actúa como sponsor en varios eventos deportivos como lo son las 500 millas del norte, el ciclismo y liga de fútbol, entre otros.
Siempre intentan que Comaja done a favor del beneficio de todos, puesto a que afirman que el dinero es de los socios únicamente y que lo único que ellos hacen es administrarlo. También, se realiza trabajo con escolares a través de seis escuelas con educación financiera y cooperativa, valores y juegos cooperativos.
Va a incorporarse próximamente una biblioteca móvil que, durante un tiempo, el material se encontrará en una escuela para luego rotar hacia otra y acabar finalmente en la renovación del contenido antes de una nueva circulación.
Existe además, una biblioteca de contenidos de estudio y de recreación para socios, hijos y nietos de socios. Se les hace entrega del material de estudio fotocopiado (no entregan copias de libros enteros, solo de capítulos requeridos por el estudiante) sin costo alguno. Finalmente, cuentan con una biblioteca de adultos que ofrece novelas y distintos tipos de contenido literario.
En torno a las iniciativas de esta índole Medina afirmó que “la educación en cooperativismo es una ideología que necesita ser alimentada para mantenerse viva y dependerá de las acciones que hagamos ahora lo que será en el futuro”.
