La salud sexual no tiene que ver simplemente con la ausencia de enfermedad; por el contrario, se vuelve parte integral de la salud humana, una cuestión de bienestar holístico (físico, mental, emocional) que permite a las personas alcanzar su máximo potencial. Permite construir relaciones sobre la base de la confianza y el respeto mutuos, y da la oportunidad de crear un espacio seguro desde el cual podamos expresarnos y conectarnos con las y los demás.
Es inseparable del pleno goce de los derechos humanos, incluido el derecho de toda persona a la autonomía corporal. Es por ello que cada 4 de septiembre se convierte en una oportunidad para informar a las personas sobre los factores de riesgo, enfermedades de transmisión sexual y contagios, así como de las precauciones pertinentes para una vida sexual saludable.
Es importante resaltar que el consentimiento es parte indispensable de la salud sexual. Toda persona tiene derecho a decidir sí, cuándo y con quién tener relaciones sexuales. Con esto en mente, el Día Mundial de la Salud Sexual de este año destaca la importancia del consentimiento al convertirlo en el tema del día.
Toda persona tiene derecho a tomar sus propias decisiones acerca de sus vidas y cuerpos, incluso sí y cuándo quiere tener hijos. Esto significa que todas y todos debemos poder acceder a todo lo que necesitemos, incluidos los anticonceptivos y la gama completa de servicios e información sobre salud sexual y reproductiva, para hacer realidad estos derechos.
Cuando conocemos nuestros propios cuerpos, cuando entendemos cómo cuidarnos y protegernos y cuando podemos acceder fácilmente a servicios y apoyo. No obstante, con demasiada frecuencia se niega el derecho a la salud sexual, especialmente a las mujeres y niñas, a las personas LGBTQI+, a las personas con discapacidad y las personas que viven en la pobreza o pertenecen a comunidades que enfrentan discriminación.
Este día nace como una iniciativa promovida por la Asociación Mundial de la Salud Sexual desde el año 2010 con el objetivo de concientizar a la población sobre la importancia de la promoción de la salud sexual segura como parte de la salud integral de la persona. Por otro lado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pide informar más a las personas de las enfermedades que se transmiten con las relaciones sexuales.
Un factor de riesgo más importante es el virus del papiloma humano (HPV), que se trasmite a través de la actividad sexual y puede generar cáncer de cuello de útero en la mujer, pero también cáncer de pene en el hombre, cáncer peni-anal y cáncer orofaríngeo; por lo que la prevención es importante tanto para la reducción del cáncer de cuello uterino como para prevenir estos otros tipos de enfermedades.
En la actualidad existe la vacuna contra el HPV, que los especialistas aseguran que “es segura y eficaz”. Se recomienda que se realice tanto en hombres como en mujeres, previo al inicio de la actividad sexual, a partir de los 11 años. En Uruguay está integrada al Certificado Esquema de Vacunación (CVEV), por lo que se encuentra disponible de forma gratuita en dos dosis hasta los 26 años.
En septiembre de 2023, el Ministerio de Salud Pública anunció la incorporación del test del Virus del Papiloma Humano como método de detección temprana de este cáncer, que desplazará paulatinamente a la colpocitología oncológica o papanicolau. Este es un test más sensible que se realiza cada 5 años.
el riesgo son ustedes y sus leyes zurditos. ley de genero, aborto…desesperados porque no haya bebes en el mundo. cuanto les estan pagando zurditos a traves de las ONGs?
La plata sucia de la izquierda circula por ahi..sabian ciudadanos que viven en las nubes no?