La intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, respondió ayer a las críticas realizadas por el nuevo impuesto a los inflamables, que sustituyó la tasa existente. Esta había sido declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia. El impuesto se aplicará a los camiones que con determinada carga de combustible, circulen por Montevideo.
Cosse dijo a la prensa “era una tasa, se presentó un recurso de inconstitucionalidad, la Suprema Corte dijo que tenía que ser un impuesto, lo convertimos en un impuesto. No tiene impacto sobre el precio del combustible. Estamos hablando de que el impacto son diez centésimos de peso o veinte”.
Aclaró que “los camiones de combustibles son los camiones más pesados que hay y no tienen circulación restringida, lo cual está bien porque tienen que llegar a todas las estaciones. Tienen circulación libre por la ciudad los camiones más pesados y esto es una forma de que devuelvan a la ciudad y se pueda mitigar parte del daño, del esfuerzo que le suponen a la ciudad”.
Frente a las críticas recibidas desde el gobierno por la aplicación del nuevo impuesto, la jerarca señaló que “cuando el gobierno pensó que esta tasa no estaba más, bajó el combustible diez centésimos de peso. A los hechos me remito”. Y agrego: “Estoy presenciando una escalada de disparates que a esta altura no puedo comentar porque rebajo la capacidad intelectual de las personas. Es un disparate sobre otro, cuando los problemas que tiene el Uruguay son otros: corrupción, falta de transparencia, una sociedad que tiene problemas en su tejido social, en los barrios que andan a los tiros, la gente no se anima a salir de la casa. Yo ya no puedo estar comentando los disparates que salen para distraernos. Yo no me distraigo, la intendencia tampoco, y vamos a seguir trabajando por la gente”.
Mira di concretamente a que país te refieres, que por suerte no es Uruguay