Los intendentes de Montevideo, Carolina Cosse y de Canelones, Yamandú Orsi, y Lavalleja, Mario García, se reunieron ayer con el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) y el Ministerio de Ambiente, debido a la situación del agua en Montevideo y llevaron una serie de propuestas.
Desde la intendencia de Montevideo se plantearon 20 medidas. La primera es declarar la alerta «de forma que la población tome conciencia de la situación real y adopte las acciones recomendadas por las autoridades». También designar en el marco del Sistema Nacional de Emergencia, un comité de crisis conformado por todos los actores relevantes del gobierno para un seguimiento de la situación y coordinación de acciones a través Cecoeds. Otras propuestas pasan por una campaña intensa de comunicación a la población, publicar en formato abierto todos los datos disponibles sobre el agua de forma diaria y prohibir el uso de agua de OSE para actividades como lavado de veredas, riego, lavado de autos.
A esto agrega evaluar la posibilidad de quitar el IVA de los productos de agua potable envasada. Asimismo, habría que asegurar a la población beneficiaria del Mides un mínimo de agua sin costo por familia, hasta que el agua vuelva a ser potable. Asimismo controlar los precios de las aguas embotelladas, de forma que el aumento en la demanda no genere una escalada de precios.
También se propone generar un sistema de inspección integrado para relevar pérdidas de agua, utilizando todos los recursos de la Intendencia de Montevideo (call center, inspectores, motocarros, etc). Otras medidas son revisar las tarifas de Ose, distribuir agua en camiones cisterna, recetar agua embotellada a grupos de riesgo, embolsar agua potable, Realizar un mapeo de sitios críticos de distribución de agua potable (centros educativos y de salud, residenciales de ancianos, etc), generar ámbitos con grandes consumidores de agua para coordinar acciones voluntarias de ahorro de agua, facilitar los mecanismos para la importación de agua. Tambien se plantea contemplar especialmente a los refugios de animales así como los establecimientos rurales de forma de garantizar agua adecuada.
Cosse dijo sobre la tarifas de OSE que se propuso «un esquema en el cual se estableció un mínimo, y por debajo de ese mínimo la tarifa se reduzca o baje a cero,que incluso se exonere a determinadas áreas sociales y que por encima de ese mínimo se suba» y acotó que «no ha habido un buen manejo de la crisis, estamos en una crisis. Ha sido un manejo un tanto negacionista”. Para Cosse “tenemos un horizonte de 20 días de agua en estas condiciones y a partir de lo cual ya verdaderamente sería muy difícil llamarla potable» aunque aclaró «yo creo que ya no es potable”
