El hallazgo de un murciélago infectado con el virus de la rabia fue detectado en el centro de Montevideo. Periodicamente se capturan estos animales para examinarlos. Es muy común que estén sobre plazas del centro ya que la luz atrae insectos que son su comida.
La información fue brindada por la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis (CNHZ) del Ministerio de Salud Pública (MSP). En un comunicado se indica que «este hallazgo se da en el marco de la viglancia de la rabia que desarrollan de forma permanente y conjunta el MSP y el Ministerio de Genadería, Agricultura y Pesca».
Ya habían sido detectados dos casos antes en Paysandú, por lo que es el tercero desde noviembre del año pasado en el país. Aunque no hay casos de rabia humana en Uruguay desde 1966 ni en perros desde 1983, «la actual situación es de riesgo pera las personas y mascotas que entran en contacto con murciélagos, porque el virus mantiene un cido aéreo en estos animales insectivoros de nuestro país». Tradicionalmente los perros han sido el principal (casi el único) reservorio y transmisor de la rabia. En la actualidad, en las regiones del mundo no endémicas donde la vacunación de los perros está extendida, es el murciélago el reservorio y transmisor más importante de la infección al hombre.
La transmisión de la rabia desde murciélagos infectados a los humanos es posible aun sin mordedura o arañazo (o tras mordeduras mínimas e inadvertidas), por contacto con el animal o su orina, heces y otros productos. Por este murcielago infectado que se detectó, equipos multiisciplinarios del MSP, la Intendencia de Montevideo y la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis comenzaron ayer hacer recorridas por la zona céntrica de la ciudad informando sobre las medidas preventives y vacunando perros y gatos contra la rabia. Desde la Comisión Nacional Honoraria de Zoonosis se exortó a la población a mantener a los animales de compañía inmunizados contra a rabia y no manipular murciélagos vivos o muertos a mano desnuda. El comunicado agrega que «los murciélagos insectivoros son parte de nuestra fauna urbana autóctona y que cumplen una función muy importante en la cadena trófica puesto que son controladores biológicos de verios insectos. Por tanto, no deben ser eliminados y si respetados».
