La carga de las dietas malsanas constituye un importante problema de salud pública y de desarrollo en todo el mundo. Por ello, es necesario actuar urgentemente para modificar la producción y el consumo excesivos de alimentos y bebidas con un perfil nutricional poco saludable, principalmente los alimentos de la industria alimentaria.
Se calcula que 1,89 millones de muertes anuales están asociadas con el consumo excesivo de sodio, una causa bien establecida del aumento de la tensión arterial y de un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Reducir la ingesta de sal es una de las formas más costoeficaces de mejorar la salud y reducir la carga de las enfermedades no transmisibles, ya que puede evitar un gran número de muertes y complicaciones cardiovasculares mediante programas de costos totales muy bajos.
El consumo excesivo de la sal en las comidas, además de favorecer al incremento de la presión arterial, es un factor de riesgo que a su vez puede causar enfermedades cardiovasculares e incluso generar otras afecciones como alteración de la función de los riñones, aumento del riesgo de cáncer, principalmente de estómago, incremento del riesgo de osteoporosis y desarrollo de la obesidad.
Consumir menos sal es posible, la reducción de este ingrediente en las comidas es necesario para prevenir enfermedades. Al disminuir la cantidad de sal, el ajuste de las papilas gustativas se logra de forma gradual y es cuando se logra apreciar los alimentos y reconocer una amplia gama de sabores.
Para reducir el consumo de la sal en la alimentación diaria se recomienda: disminuir la cantidad de sal al preparar las comidas, saborizar las comidas con especias y hierbas aromáticas como albahaca, laurel, orégano, pimienta u otros. No colocar el salero en la mesa a la hora de comer, para evitar agregados de sal; limitar el consumo de alimentos ultraprocesados: snacks, productos empaquetados, enlatados, embutidos, caldos concentrados en cubos o sopas instantáneas.
Asímismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una serie de políticas de mejor inversión relacionadas con el sodio a modo de medidas prácticas que los países deberían adoptar con prontitud para evitar enfermedades cardiovasculares y sus costos asociados. Entre ellas, la reducción del contenido de sodio en los alimentos; el uso de un etiquetado en la parte frontal de los envases; campañas en los medios de comunicación, y compras y servicios públicos de alimentos.
Buen día. La dieta malsana es más que agregar sal. La dieta malsana son los carbohidratos en todas sus formas. Papas, boniatos, arroz, harinas etc.etc. comer sano cura el cuerpo. Averiguen