En los siguientes días empezaría la vacunación en Ecuador contra la viruela del mono. El Según Francisco Pérez, viceministro de Gobernanza y Vigilancia de la Salud Pública del Ministerio de Salud Pública (MSP), se han adquirido alrededor de 5.800 dosis de vacunas, 1.800 de las cuales ya llegaron ayer a Ecuador y están en proceso de desaduanización.
La inversión es de alrededor de unos medio millón de dólares a lo que se añade gastos administrativos de desaduanización, fletes, etc. Cada vacuna tiene un valor de unos $ 120.
La gestión se hizo a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Habrá dos esquemas a aplicar y habrá dos dosis por persona. El primero, explicó Pérez, que es la pre exposición, es decir, se inmuniza antes de que se expongan las personas y esto va orientado, sobre todo, a personal sanitario o de laboratorio que realizan las labores de toma de muestras y de tratamiento que generalmente están en centros de salud.
El otro esquema es lo que Pérez llama de post exposición para aquellos contactos cercanos de las personas que están enfermas. El proceso iniciará con el personal sanitario en los próximos días.
También en Brasil
El primer lote importado de vacunas contra la viruela del mono, ya está en Brasil. Según el Ministerio de Salud, el cargamento de 9,8 mil dosis aterrizó el martes en el Aeropuerto de Guarulhos, São Paulo.
A través del fondo rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPAS), se han comprado alrededor de 50 mil dosis hasta la fecha. Los próximos lotes deben entregarse hasta finales de 2022. El lote de inmunizadores se destinará a estudios, de acuerdo con lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). “Es importante destacar que las vacunas son seguras y actualmente se utilizan contra la viruela humana o la llamada viruela común. El estudio pretende generar evidencias sobre la efectividad, inmunogenicidad y seguridad de la vacuna contra la viruela del mono y, así, orientar la decisión de los gestores”, se informó.
La investigación será coordinada por la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) con el apoyo de la OMS y financiamiento del ministerio, el cual discutió el estudio con la misma OPAS y expertos en el tema.
