Un nuevo informe científico advierte que el cambio climático está afectando «procesos planetarios vitales» en los océanos y poniendo al Amazonas «al borde del colapso a gran escala». Este documento, elaborado por varios equipos de investigación y promovido por organizaciones como Future Earth, The Earth League y el World Climate Research Programme, destaca la amenaza que enfrentan las futuras generaciones, revirtiendo años de progreso en salud reproductiva.
Titulado “Diez nuevas perspectivas en la ciencia del clima”, el informe reúne investigaciones de los últimos 18 meses con el objetivo de influir en las negociaciones de la próxima COP29. Aunque el informe menciona «nuevas» perspectivas, muchas de estas ideas ya han sido debatidas desde el Acuerdo de París.
Las primeras recomendaciones subrayan la necesidad de reducir las emisiones de metano, combatir la contaminación atmosférica, y tener en cuenta el aumento de temperaturas y humedad, que están superando los límites de habitabilidad. También se menciona el impacto de climas extremos en la salud reproductiva, así como los efectos globales de fenómenos como El Niño.
Además, el informe aborda la vulnerabilidad de infraestructuras críticas y la escasez de estrategias de adaptación en las ciudades, junto con la competencia por minerales esenciales para la transición energética. El último punto enfatiza la importancia de la equidad y la aceptación pública en la implementación de políticas climáticas, destacando que estas serán efectivas solo si se consideran las preocupaciones de los ciudadanos.
Los científicos instan a los responsables políticos a reflexionar sobre estos hallazgos en la cumbre de Bakú y a actualizar sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), ya que el incremento de temperaturas globales aleja a los países de los objetivos del Acuerdo de París, especialmente en contextos vulnerables. La profesora Joyashree Roy subrayó que el 40% de la población mundial ya es «muy vulnerable» a estas condiciones, advirtiendo que ignorar las necesidades ciudadanas en el diseño de políticas climáticas puede resultar en un enfoque debilitado e ineficaz.
