Investigadores de la Universidad de Lisboa han encontrado el que podría ser el dinosaurio más grande que se ha descubierto hasta la fecha en Europa.
Los restos se han hallado en el centro de Portugal, en Pombal, y corresponden a un dinosaurio saurópodo de aproximadamente 12 metros de alto y 25 de largo.
Todo comenzó cuando un hombre de Pombal encontró varios fragmentos de huesos fosilizados en su terreno, cuando realizaba trabajos de construcción en la propiedad. Entonces, contactó con el equipo de investigación, que realizó la primera campaña de excavación.
Entre el 1 y el 10 de agosto de este año, paleontólogos españoles y portugueses han desenterrado los restos. Los saurópodos eran herbívoros, cuadrúpedos, con cuello y cola largos. «No es habitual encontrar todas las costillas de un animal así, y mucho menos en esta posición, manteniendo su posición anatómica original. Este modo de preservación es relativamente poco común en el registro fósil de dinosaurios, en particular de saurópodos, del Jurásico Superior portugués», dice Elisabete Malafaia, investigadora de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa, en una nota difundida por el centro.
Hasta el momento, se ha obtenido un importante conjunto de elementos del esqueleto axial, que incluye vértebras y costillas de lo que podría ser un dinosaurio saurópodo braquiosáurido. El grupo Brachiosauridae está compuesto por especies de gran tamaño que vivieron desde el Jurásico Superior hasta el Cretácico Inferior, hace aproximadamente 160-100 millones de años, y se caracterizan por la presencia de extremidades anteriores marcadamente desarrolladas.
Algunas de las especies de dinosaurios más emblemáticas pertenecen a este grupo de saurópodos, como Brachiosaurus altithorax y Giraffatitan brancai , así como la especie del Jurásico Superior portugués que se encuentra en la región Oeste de Portugal, Lusotitan atalaiensis.
Las características de conservación de los fósiles y su disposición indican la posible presencia de otras partes del esqueleto de este dinosaurio. Esta hipótesis va a ser contrastada en futuras campañas de excavación en el yacimiento. «La investigación en el enclave paleontológico de Monte Agudo confirma que la región de Pombal cuenta con un importante registro fósil de vertebrados del Jurásico Superior, lo que ha permitido en las últimas décadas el hallazgo de abundantes materiales muy significativos para el conocimiento de las faunas continentales que habitaron la Península Ibérica hace unos 145 millones de años», añade Elisabete Malafaia.