Los hinchas de Peñarol rompieron los baños de la tribuna Héctor Scarone, generando un perjuicio para ellos mismos ya que ante las roturas se debió cortar el agua y eso generó que la gente debiera pasar toda la tarde sin agua en esa tribuna, donde tampoco había puestos de venta de refrescos.
Otra de las situaciones negativas de la fiesta clásico estuvo en el hecho de que los pasamanos de la tribuna donde estaría Peñarol habían sido engrasados previamente.
Al hacer su arribo, los aurinegros se percataron de que pasamanos y fierros paraavalanchas estaban engrasados, al igual que algunos de los sectores de los tejidos.
Así lo denunciaron a través de redes sociales periodistas partidarios e hinchas carboneros que llegaron con anticipación a la tribuna Héctor Scarone.
“Estaban los escalones con grasa para que la gente se cayera. Es extraño que la barra de ellos tuviera acceso a la tribuna el día anterior. Lo que hagan los hinchas está fuera de nuestro alcance, pero que les abran la tribuna me extraña”, dijo Ignacio Ruglio, que hizo su arribo al Gran Parque Central sobre las 14:10 horas, luego de los hinchas, porque viajó junto al plantel y posteriormente se trasladó a la cabecera para observar allí el partido.
El operativo que trasladó a los hinchas de Peñarol desde el viejo Mercado Modelo al Gran Parque Central para el clásico de este domingo a las 15:30 horas se desarrolló con normalidad. Sólo 13 no pudieron viajar, fuera por entradas falsas o por no tenerlas.
A dos horas del inicio del partido ya estaban los 2.187 fanáticos aurinegros (11 menores) dentro del estadio de Nacional, al que llegaron en 48 ómnibus y donde se encontraron con una sorpresa negativa.
