El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha avisado de «posible actividad extremista». Esto tras la decisión adoptada el viernes por el Tribunal Supremo para revocar el derecho constitucional para la suspensión del embarazo.
Los objetivos abarcan un amplio espectro, según el memorándum recogido por la cadena CNN, desde sedes del Gobierno, juzgados, hasta organizaciones tanto a favor como contrarias al aborto.
«La libertad de expresión y el derecho a protestar pacíficamente de los estadounidenses son derechos constitucionales fundamentales. Esos derechos no se extienden a la violencia y otras actividades ilegales», ha recordado un portavoz de Seguridad Nacional a CNN en un comunicado.
«El DHS continuará trabajando con nuestros aliados en todos los niveles del gobierno para compartir información y apoyar los esfuerzos de aplicación de la ley para mantener seguras a nuestras comunidades», ha añadido.
El DHS publicó previamente un boletín del Sistema Nacional de Asesoramiento contra el Terrorismo que advertía sobre la posible violencia en torno al fallo de la Corte Suprema sobre el derecho al aborto.
La Policía ha usado gases lacrimógenos durante las protestas frente al edificio del Senado de Arizona, en Phoenix.
Malestar en Estados Unidos
Luego de que se rompiera parte de una puerta, dijo el Departamento de Seguridad Pública del estado. «Esta noche, una multitud de manifestantes golpeó las puertas de vidrio del edificio del Senado. Parte de una puerta estaba rota. La Policía lanzó gas lacrimógeno», ha declarado el portavoz del DPS, Bart Graves, en un correo electrónico recogido por NBC.
Con información de Europa Press.
