Alberto Iglesias, expresidente de Casa de Galicia, enfrenta cargos por favorecer a ciertos acreedores al ordenar el pago dos días antes de solicitar el concurso de la mutualista. Este jueves, la justicia imputó a Iglesias por delitos de insolvencia societaria fraudulenta y fraude concursal.
Según el artículo 248 de la Ley de Proceso Concursal: “El deudor que en oportunidad de la solicitud de concurso o en cualquier etapa posterior, acuerde u otorgue a sus acreedores ventajas particulares, será castigado con un año de prisión a cinco años de penitenciaría. En el caso de las personas jurídicas, incurrirán en este delito los socios, directores, administradores, de hecho, o de derecho, que hayan aprobado la realización o hayan realizado los actos constitutivos del delito”.
Tambien se le imputa el delito de insolvencia societaria fraudulenta.
Como medida cautelar hasta el 31 de mayo, se le impuso la obligación de fijar domicilio y la retención de sus documentos de viaje. La investigación está en manos del fiscal de Delitos Económicos y Complejos, Gilberto Rodríguez, quien aclaró que no se solicitaron medidas más restrictivas, como la reclusión, debido a la disposición constante de Iglesias para colaborar con la Fiscalía.
No lo levanta ni con el 2 de la muestra…