En una importante jornada de movilización los trabadores de todos los sectores vinculados a la empresa estatal, que conforman la Coordinadora de Sindicatos de ANCAP, expresaron una amplia plataforma reivindicativa. Entre los puntos más destacados se escuchó el pedido de mayor diálogo con el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, a quien le han solicitado una reunión desde hace tiempo sin éxito. Sin duda otros de los principales elementos del reclamo obrero pasaron por los puestos de trabajo y las medidas anunciadas desde el gobierno en la industria del cemento.
Desde los gremios se hace hincapié en que hay en juego el futuro de “cientos de familias” directamente afectadas. Se deslizó también la crítica hacia la oposición, al Frente Amplio, reclamando “presencia” y “posicionamiento” ante los procesos privatizadores que se llevan adelante y que violentan la decisión popular.
Hoy se asiste a un plan de privatización de la empresa pública, “quizás silencioso para la opinión pública”, pero que “se viene concretando día a día con diferentes iniciativas” afirmó el dirigente de laUnión Autónoma de Obreros y Empleados de la Compañía del Gas, Alejandro Acosta.
El directorio de ANCAP definió las bases para un llamado a interesados privados en asociarse con la empresa pública en el negocio del portland, bajo el argumento que es una actividad deficitaria desde hace muchos años, este se ha transformado en uno de los principales puntos de desacuerdo con los sindicatos. Para estos últimos se trata de una cuestión que tiene que ser “abordado por el conjunto de la sociedad”, no de espalda a la consulta popular que aprobó la defensa de las empresas públicas.
Para RichardFerreira, representante del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca), está clara la intención de “privatizar el portland estatal”, “sin la consulta popular y sin oír a las organizaciones sociales”. La crítica del dirigente fue más allá, sosteniendo que se trata de un estilo que lleva adelante la coalición, “tiene que ver con una forma de gobernar sin la participación del conjunto de la sociedad en cuestiones realmente sensibles”.
Desde el sindicato de la construcción se dejó saber su preocupación por la situación de los más de 550 trabajadores que ocupan las empresas cementeras de producción de portland ubicadas en Minas y en Paysandú. La incertidumbre es lo que prima entre los trabajadores ya que ven peligrar sus puestos de trabajo, tanto a los organizados en el SUNCA como para aquellos de la actividad privada que se verán afectados.
Los distintos representantes de la Coordinadora de Sindicatos que se reúnen en torno a ANCAP hicieron saber en el acto sus preocupaciones por el momento que vive el mundo del trabajo. Así el caso de la industria química, que remarcó su rechazo a la eliminación de la obligación de mezclar biodiesel en el gasoil, con el argumento de parte de las autoridades que esto disminuía costos. “Una política avasalladora” que “incumple un tratado internacional firmado por Uruguay” que a suvez “deja pendiendo de un hilo los puestos de trabajo” afirmó Nicolás Lema representante del sindicato.
En tanto y en representación de los trabajadores del supergás, Andrés Guichón, denunció el sistema “menos regulado y competitivo” que piensa impulsar el gobierno frente a la finalización de los contratos de envasado y distribución con las empresas Riogas y Acodike, en marzo del año que viene.“Hoy por hoy vemos que ANCAP denuncia los contratos y se retira de la empresa Gasur. Los trabajadores de esa empresa están a la deriva, no saben qué va a pasar con ellos. Queremos defender los puestos de trabajo y también el servicio de ANCAP a la población”.
Desde los sindicatos se asegura que se tiene una actitud proactiva y que en ese sentido se han llevado propuestas al directorio del ente, sobre todo en uno de los temas que más preocupa, el cemento portland. Se destaca que los ámbitos de negociación han sido buenos y los planteos escuchados por la dirección, se reclama lo mismo para quienes son los que llevan adelante los planes estratégicos del gobierno, de ahí el pedido de reunión con el ministro Paganini y asu vez reclaman que el parlamento debe asumir un papel protagónico.