La situación en Gaza se ha deteriorado drásticamente, con un reciente aumento en el número de muertos a causa de los bombardeos israelíes. Según el Ministerio de Sanidad, en las últimas 24 horas se registraron al menos 56 fallecimientos, llevando el total a 41.965 desde el inicio del conflicto hace un año. Más de 200 personas resultaron heridas, y se estima que muchos siguen atrapados bajo los escombros debido a la intensidad de los ataques.
Los campos de refugiados de Bureij y Nuseirat, en el centro de Gaza, fueron particularmente afectados, con casi 30 muertos reportados. En el norte, en Yabalia, se observaron tanques israelíes avanzando hacia el centro de la ciudad, tras un aviso de evacuación del ejército israelí. Este último ha intensificado sus operaciones aéreas y terrestres en el norte con el objetivo de desmantelar las capacidades de Hamas.
Además, en Rafah, un ataque de dron israelí dejó ocho muertos al golpear un punto de recogida de agua, lo que subraya la gravedad de la crisis humanitaria en la región. La violencia y la inestabilidad continúan afectando gravemente a la población civil.
