Esta votación tiene lugar después de varias semanas de negociación entre el gobierno y los partidos de la coalición, que culminaron la semana pasada con un acuerdo.
Después de ser aprobada hoy la reforma, los diputados volverán a reunirse mañana martes para comenzar a votar los artículos del proyecto en una sesión que se espera que dure muchas horas y que enfrentará una importante movilización sindical en contra que está fuera del Palacio Legislativo.
El proyecto de reforma ya fue aprobado en el Senado, pero en la Cámara de Representantes sufrió numerosas modificaciones, varias de ellas significativas, por lo que el texto volverá a la Cámara Alta para su aprobación definitiva.
En resumen, la reforma de la seguridad social aumenta la edad de retiro de 60 a 65 años, de manera gradual a partir de las personas nacidas en 1972. Los partidos que conforman la coalición de gobierno argumentan que la reforma es necesaria e inaplazable para garantizar la sustentabilidad del sistema de previsión social en las próximas décadas y reducir el déficit del sistema, que actualmente supera el 13% del producto bruto interno y se busca bajar al 10%.
Por otro lado, el Frente Amplio opina que esta reforma perjudica a la mayoría de los trabajadores, ya que aumenta los años de trabajo y reduce las jubilaciones futuras. Además, aseguran que generará dificultades tanto para mantener el trabajo a los mayores de 60 años como para acceder al empleo en los jóvenes.
