De acuerdo con la información primaria, el incidente ocurrió sobre las 8 horas en una vivienda ubicada en las inmediaciones de la calle Colonia de San José de Mayo.
Estaba armado, dijo el agente
El agente de 39 años volvía a su casa tras cumplir funciones en la cárcel de Juan Soler. En ese momento, se acercó la víctima, un hombre de 42 años poseedor de ocho antecedentes penales, a pedirle hielo.
El ahora imputado declaró que el fallecido concurrió a su vivienda con un arma en su mochila. El efectivo le dijo que entregara la pistola y este se negó para luego irse del lugar. Ante esta situación, el funcionario lo siguió y, supuestamente cuando vio que la víctima iba a sacar el arma para apuntarlo.
En ese momento, el policía tomó su arma de reglamento y le disparó al hombre en cuatro ocasiones. Tres de los proyectiles le dieron al sujeto en la espalda, mientras que el cuarto alcanzó a rozarle el brazo. A raíz de las heridas que sufrió, la víctima murió en el momento.
Fue el propio agente quien llamó al 9-1-1 para denunciar lo ocurrido. En el momento en el que las autoridades llegaron al sitio se toparon con el fallecido tendido en vía pública. Allí mismo se encontraba el homicida, quien tenía en la mano el morral con el arma que supuestamente incautó. El agente entregó su arma de reglamento junto con la otra.
La fiscal de 2° Turno, Beatriz Protesoni, resolvió imputar al homicida con la figura de homicidio agravado por el uso de arma de fuego. De acuerdo con Terlemundo, la Justicia dictó medida cautelares de fijación de domicilio, presentación en la seccional policial correspondiente a su domicilio y prohibición de salir del país.
