Desde el equipo de campaña de Kamala Harris alertan de que se avecinan «de cuatro a seis semanas en las que todos van a demandar a todos» porque podría llevar días declarar a un ganador en varios estados, informa la CNN.
Por otra parte el expresidente de Estados Unidos Donald Trump votó en un colegio electoral de Palm Beach, en el estado de Florida, acompañado de su esposa, Melania, antes de prometer a los periodistas que le esperaban que reconocerá su derrota «si las elecciones son limpias».
«Si pierdo unas elecciones, si son limpias, sería el primero en reconocerlo», ha dicho Trump, después de llamar «locos» a quienes han asegurado durante la campaña que no aceptaría otro resultado que no fuera vencer en estas presidenciales.
A pesar de haberse mostrado convencido de su triunfo ante los medios, Trump no ha perdido la ocasión de protestar por el sistema electoral estadounidense, al cual ha reprochado tardar demasiado en ofrecer los resultados. Para Trump se trata de un «proceso demasiado complicado» que ha provocado que se presentaran numerosos y cuantiosos pleitos legales para cuestionar estos últimos años los resultados de las pasadas presidenciales cuando se podría agilizar con una papeleta. «El papel es más sofisticado ahora que los ordenadores», ha dicho.
«Es increíble. No hay nada que puedas hacer para engañar. Y no te cuesta prácticamente nada. Gastamos cientos de millones de dólares en estas campañas. Se podría hacer por el 8 por ciento del costo y tener mayor precisión, y no estar preocupados por cuándo lo anunciara Pensilvania. Es una pena», ha asegurado.