“La conquista de los derechos de las mujeres es un camino constante”

La Doctora en Derecho y Escribana Pública, Fabiana Goyeneche es la actual Directora de Relaciones Internacionales y Cooperación de la Intendencia de Montevideo (IM), quien como mujer y feministas ha puesto en agenda todos aquellos temas que “implican a la vida de las mujeres” y nos habla de las “gotas que van contribuyendo a retroceder en las grandes conquistas que Uruguay había logrado” y de los caminos que hay que seguir recorriendo.

“Uruguay ha sido históricamente pionero en el avance de los derechos de las mujeres, porque ha conseguido y alcanzado conquistas como país precursor mucho antes que otros y es un valor que permanece” consideró para plantear que “valorando y observando la situación actual estamos en un momento muy preocupante, donde confluyen dos cosa”, por un lado y separando entre períodos de gobierno, reconoció que al inicio del actual “habían muchas cosas pendientes”, como por ejemplo “no teníamos una declaración de que la violencia de género era una emergencia nacional, que para que implicara un efecto concreto y eficaz sobre mejorar la vida de las mujeres y prevenir y erradicar la violencia, hacían falta pasos contundentes, por ejemplo, aumentar el presupuesto destinado a combatir la violencia de género, mejorar el acceso a la justicia, mejorar las condiciones y avanzar en igualdad, en participación política, en reducción de la brecha de género”.

Por otro lado expresó que “la lucha por la igualdad y la conquista de los derechos de las mujeres es un camino constante, no es que se había alcanzado y estábamos en un podio” y ante esto mostró preocupación porque “no solo no se avanzó sino que hemos tenido un importante retroceso” ejemplificando con “la disminución tanto en prevalencia y en importancia política, como administrativa y en el fortalecimiento presupuestal del Instituto Nacional de las Mujeres, que nuclea toda una gran discusión sobre qué institucionalidad debe tener la rectoría de las políticas de igualdad, pero yo creo que más allá de la discusión sobre las formas o sobre lo administrativo queda en evidencia que la institucionalidad rectora de los derechos de las mujeres no se ha fortalecido, no tiene un presupuesto necesario, no lo tienen políticas de género y eso repercute directamente en la atención”.

Goyeneche entiende que “ha habido una agenda legislativa, casi que explícitamente en contra de los derechos de las mujeres y en contra de la agenda feminista”, poniendo de ejemplo para reforzar su opinión “la ley de corresponsabilidad en la crianza” que entiende “va contra importantes principios y contra mucha evidencia científica que ha mostrado que son necesarias ciertas políticas para proteger a las mujeres y a las infancias”, añadiendo además que “el discurso de las personas y movimientos que han promovido la aprobación de esta ley, tienen una clara y explícita agenda en contra de las políticas de igualdad”.

En ese sentido reiteró que “estamos sin duda en un momento que es profundamente preocupante, porque sigue habiendo una gran violencia basada en género, donde hay un discurso y un movimiento de reacción contra la agenda feminista y contra las mujeres, que repercute directamente en el poco acceso a la justicia, en las brechas y faltas de autonomía y en las políticas de cuidados” sumando que “el Sistema Nacional Integrado de Cuidados, que venía dando pasos sumamente contundentes, fue prácticamente desarmado durante esta administración”, concluyendo así que “han sido gotas que van contribuyendo a retroceder en las grandes conquistas que Uruguay había logrado”.

Caminos que quedan por seguir recorriendo y fortaleciendo

Ante un nuevo 8 de marzo Goyeneche considera que hay tres cosas “fundamentales” por las que alzar la voz, primero “la autonomía económica de las mujeres, sobre todo de las jefas de hogar, hay que avanzar en políticas que realmente den acceso al trabajo decente, reduzcan la brecha salarial, no solamente por sus derechos y por sus vidas, sino porque la pobreza y la falta de autonomía económica está directamente relacionada con la infantilización de la pobreza. Entonces si nosotros queremos mejorar las condiciones de vida de las niñas y de los niños es fundamental esta autonomía”.

En segundo lugar reiteró que “es necesario fortalecer el Sistema Nacional Integrado de Cuidados, tener políticas de corresponsabilidad entre hombres y mujeres, pero también con responsabilidad entre los privados y el Estado para que todos contribuyamos”.

En tercer lugar, pero en mismo nivel de importancia, expresó que “hay que avanzar realmente en la lucha contra la violencia de género y esto implica mejor acceso a la justicia, un profundo cambio y una profunda mejora en atender las situaciones de trata, de la desaparición de mujeres, particularmente de adolescentes y de jóvenes, que ocurre y que no parece estar despertando la preocupación y la atención que requeriría; y ni que hablar políticas que protejan y acompañen a las a la sobrevivientes y a las víctimas no solo en el proceso judicial, sino también en el día, porque tenemos derecho a poder construir una vida de plenitud, de felicidad y segura”.

Política y compromiso de la IM

Desde la Intendencia, informó que Carolina Cosse “definió desde el comienzo de su mandato en primer lugar, un gabinete paritario, siendo un mensaje muy importante desde los simbólico y lo político, que además demuestra que la presencia y la participación de mujeres en lugares de decisión tiene resultados y tiene efectos concretos que hacen una diferencia en la forma de trabajar, de hacer política, de discutir y dialogar”, luego “estuvo como prioridad aumentar significativamente el presupuesto destinado al combate de la violencia de género cuando comenzó el plan ABC, avanzando en la atención a través de las comunas y generando una línea de atención a los varones que quieren acompañamiento”.

También desde el Área de Relaciones Internacionales y como mujer feminista “hemos trabajado en alianzas con muchísimas otras ciudades, a nivel de Latinoamérica y del mundo, en lo que se denomina la agenda del municipalismo feminista, que no es otra cosa que poner en el centro de la discusión de los de los gobiernos locales los temas que implican a la vida de las mujeres” trayendo a Montevideo “la posibilidad de acceder a proyectos de cooperación, compartir buenas prácticas y fortalezas, aprendizaje y la formación de funcionarios y funcionarias que trabajan en el tema, también conseguir fondos para políticas específicas, mostrar a Montevideo en el mundo y mostrar las políticas que se hacen, fomentando un liderazgo de una política feminista que a nivel internacional se ha posicionado en la agenda”.