La Unión Europea (UE) es consciente del valor social y económico que tienen los videojuegos, especialmente los que se desarrollan en línea, ya demás de reclamar una mayor protección para sus usuarios, el Parlamento Europeo ha propuesto la organización de unos premios anuales de videojuegos en línea. En un informe aprobado por 577 votos a favor, los eurodiputados han recogido distintas propuestas y reclamaciones para al sector de los videojuegos, que además de ser «muy innovador» emplea de forma directa a más de 90.000 personas en la Unión Europea.
Suponen, además, «una parte crucial del ecosistema cultural y creativo, ya que representan más del 50 por ciento del valor añadido del mercado global de contenido audiovisual de la UE». Por ello, buscan reforzar la protección de los usuarios de los videojuegos ‘online’ y garantizar un entorno de juego seguro, a través de una mayor transparencia sobre los contenidos y las políticas de compra de los productos o el grupo de edad al que se dirigen.
Recalcan que los desarrolladores de videojuegos deben abstenerse de fomentar la adicción y deben tener en cuenta la edad, los derechos y las vulnerabilidades de los niños, como afirma el texto aprobado por la Eurocámara. También destacan «la falta de datos desglosados a escala de la Unión sobre el tiempo medio dedicado a los juegos, el gasto medio en el juego, la experiencia general de juego y los consiguientes efectos sociopsicológicos» que esto puede tener en los usuarios, y por ello han solicitado que «la Comisión que recopile estos datos anualmente y presente un informe al Parlamento».
Asimismo, incluyen propuestas para destacar la importancia que tiene la producción de videojuegos en el mercado único, como la organización de unos galardones anuales. Con ellos se buscaría reconocer a las empresas desarrolladoras, muchas de ellas pymes, y su aportación a este mercado en términos de «trabajo, crecimiento, innovación y promoción de los valores europeos». «El premio debe tener como objetivo promover videojuegos en línea que respeten los derechos de los consumidores o que tengan un impacto positivo en ámbitos específicos, como la educación, o en el desarrollo de capacidades», recoge el texto.
Por otra parte, el informe aprobado busca velar por la seguridad de los usuarios de videojuegos en línea en general, pero hace hincapié en la protección de los niños y adolescentes, y reconoce iniciativas impulsadas por la industria como la clasificación por edad PEGI. También mencionan la importancia que tienen los videojuegos en la salud mental, como se ha visto durante la pandemia de Covid-19, cuando demostraron su capacidad para «proporcionaron alivio durante los estrictos períodos de confinamiento» y para los usuarios pudieran «comunicarse, interactuar y crear juntos» a distancia.
Destacan el proyecto de investigación ‘EU Kids Online’, que recopila datos de la experiencia de los niños con los juegos en línea, y el papel que los videojuegos tienen también en la educación, la expresión creativa y el contenido cultural.