«Hay una necesidad de cambiar la cultura en Uruguay que normaliza la explotación y el abuso sexual de menores». Lo señaló la Relatora Especial de la ONU sobre la venta y explotación sexual de niños, Mama Fatima Singhateh quién durante 11 días recorrió Uruguay invityada por el gobierno.
La representante de la ONU se reunió con autoridades locales, entre ellos jueces, legisladores y organizaciones no gubernamentales y presentará su informe sobre el país en marzo de 2024 ante Naciones Unidas.
Para la experta en Uruguay «necesitan reeducarse, deconstruir este concepto de que una chica de 17 años que sale con un hombre de 40 años es normal. ¡No es normal, es explotación sexual! Y tenemos que entender eso». Mama Fatima visitó Paysandú y Chuy. Lo hizo ya que dijo «Uruguay sigue siendo un país de origen, tránsito y destino de víctimas de trabajo forzoso y trata con fines de explotación sexual de mujeres y niños», los cuales ingresan y egresan por las fronteras consideradas «puntos de entrada para mujeres y niños que ofrecen temporalmente servicios sexuales».
También indicó que existe un tráfico interno el cual es poco investigado y «mucho menos llevado ante los tribunales», acotando que en el país . «hay fiestas clandestinas, dónde van mujeres jóvenes y se las explota sexualmente».
En la conferencia de prensa tampoco estuvo ausente el caso Penadés, sobre el cual prefirió no expresarse ya que es una investigación en curso. No obstante dijo que «durante mis conversaciones con los interlocutores, ha habido la percepción por parte del público de que hay mucha impunidad en los casos, no solo en este caso, sino en general. Las personas dudan en denunciar porque sienten que no saldrá nada de eso, especialmente si la persona (denunciada) está en una posición de poder». Acotó que «si una víctima es lo suficientemente valiente como para denunciar, tómenla en serio. Si un asunto así ha llegado a los tribunales, trátenlo con prontitud».
Si bién admitió que hay ciertos avances » el cuidado de los niños, niñas y adolescentes sigue estando fragmentado. La explotación y el abuso sexual de menores son muy comunes en el país y están normalizados social y culturalmente y hay una gran cantidad de parejas entre niñas y adolescentes y hombres adultos, y de abusos y violencia intrafamiliares”.
“Los organismos y los prestadores de servicios de protección infantil están desbordados y su capacidad para recibir y apoyar a los menores se ve sobreexigida” acotó.
También llamó a algunos cambios. A su criterio “la educación sexual en las escuelas puede cumplir un papel fundamental para informar a los niños, niñas y adolescentes sobre los riesgos inherentes a las relaciones sexuales, la autonomía corporal y el embarazo precoz».
Sobre la reciente ley de tenencia compartida aprobada por el Parlamento, sostuvo que “pone el interés de un pequeño grupo de adultos antes del interés superior del niño y no aborda el creciente problema de violencia intrafamiliar y deja a los niños desprotegidos al exponerlos a situaciones de violencia y maltrato por parte de un integrante de la familia”.
Agregó que «contradice leyes existentes, como, por ejemplo, algunos artículos del Código de la Niñez y la Adolescencia, así como la opinión de abogados, defensores de los derechos de la infancia y legisladores. Espero que el gobierno reconsidere esta ley o, como alternativa, se comprometa a tomar medidas que aseguren que el interés superior del niño será la consideración principal para cualquier entidad que aplique esta ley”.
