El presidente de la República, Luis Lacalle Pou , se refirió ayer a diferentes temas tras participar en la ceremonia por un nuevo aniversario del Desembarco de los 33 Orientales. Uno de ellos fueron los acontecimientos en el Iava y sostuvo que «la rebeldía siempre tiene un freno» y “las leyes están para cumplirse». Se refirió en especial a la situación en la cual se encuentra el salón usado por el gremio de estudiantes. El presidente se preguntó si “¿alguien en su casa hace lo que hacen en ese salon? ¿alguien está dispuesto a que en su casa vayan y le pintarrajeen, rompan, dejen sucio?». Y acotó: «Hay que cuidar lo que es de todos como si fuera propio. No nos debe hacer estar orgullosos de tener un edificio público de esa manera”.
Lacalle Pou dijo “yo era bastante rebelde de joven. Ser adolescente y no tener rebeldía es como no haber pasado por esa edad. Pero la rebeldía siempre tiene un freno, que es cuando dañás el bien común. La rebeldía con causa de reclamo es bienvenida, ahora, ¿qué necesidad hay de romper? ¿De ensuciar? ninguno, eso no lo comparto”. El primer mandatario acotó que “las leyes están para cumplirse y los reglamentos también. Si empezamos a flexibilizar no cumplimos nada entonces, siempre excusas o argumentos hay porque, no digo que sean valederos, pero son entendibles».
Continuando con temas que tienen relación con la enseñanza dijo que leyó una noticia sobre un hecho ocurrido en Salto en 2017, dónde en una charla sobre el aborto en un liceo, se sancionó a una docente. «No vi ningún sindicato defendiendo a esa docente. Que dicho sea de paso, después el tiempo dijo que esa docente no había violado la laicidad. Claramente, los sindicatos tienen un perfil que de alguna manera tienen una filiación y que no están de acuerdo con estas políticas llevadas adelante por el gobierno”, dijo Lacalle Pou. Para el presidente de la República, y ante lo que consideró un deterioro de la educación, se hbló de reforma educativay, pero no se impulsó. En ese entonces «¿no había que reclamar? ¿O el status o el quedarse quieto es lo que queremos?. Nosotros preferimos tomar un riesgo, es el futuro de los chiquilines. Si vas mal, ¿qué hiciste? ¿Te apoltronás? Cuando las cosas van mal hay que sacudir, hay que hacer. Y a nosotros nos eligieron para hacer, no para ver cómo las cosas empeoraron» dijo.
Sobre este punto concluyó que «amputarle una educación de calidad a los niños es amputar el futuro de ellos, de generaciones y de nuestro país. No estamos en ese camino. Preferimos tener este tipo de conflictos y que se solucionen pacíficamente, que quedarnos quietos, dejar el status quo, ser conservadores y ver como los niños no pueden acceder a una educación que se necesita en estos modernos”.
Leche con agua
Lacalle Pou también hizo referencia a la reforma de la seguridad social y los acuerdos alcanzados dentro de la coalición. Sostuvo que se está cerca de un acuerdo final «en los últimos cinco metros”. Calificó el proyecto original como un litro de leche al cual se le fue agregando agua, «pero sigue siendo leche» y dijo entender los cambios pedidos por los diferentes partidos de la coalición. Estos cambios no influyeron en el espíritu de la reforma. Acotó que se modificaron cosas que a priori se creía que no podrían modificarse. «La realidad es muy fuerte. Tras los aportes de los partidos políticos debemos preguntarnos si es una buena reforma. Mi respuesta es que sí, porque para empezar es mucho mejor que lo que tenemos y es sostenible».
