Francia y Argentina vuelven a encontrarse en otro partido donde uno ganará, ya sea en los 90’, en los 120’ o en los penales, y el otro perderá y se irá derrotado, sin chance a tener revancha sino hasta dentro de 4 años.
En 2018 Argentina y Francia se veían las caras en un Mundial. El 30 de junio de 2018 la Copa del Mundo de Rusia 2018 puso a ambos equipos frente a frente, en aquella ocasión por los octavos de final. Este domingo, los albicelestes y los galos definirán el Mundial 2022.
Es cierto, ambos llegaban en condiciones distintas. Francia todavía no era bicampeón, iba por su segunda estrella, pero debía ratificar su poderío ante la Argentina. La fase de grupos la había dejado primera, aunque sin sobrarle nada, tras vencer 2 a 1 a Australia con lo justo, vencer por la mínima a Perú por 1 a 0 y empatar con Dinamarca sin goles.
La Argentina llegaba en crisis, con un DT cuestionado por los jugadores y metiéndose por la ventana en la última fecha de su zona, tras igualar con Islandia por 1 a 1, perder con Croacia por goleada (3 a 0) y vencer a Nigeria de manera agónica 2 a 1.
En ese partido jugado en el Kazán Arena, la Selección Argentina de Jorge Sampaoli formó con: Armani; Mercado, Otamendi, Rojo, Tagliafico; Mascherano, Enzo Pérez y Banega; Pavón, Di María y Messi.
Francia lo hizo de la siguiente manera: Lloris; Pavard, Varane, Umtiti y Lucas Hernández; Kanté, Pogba, Matuidi y Griezmann; Mbappé y Giroud.
En Catar 2022 hay varios sobrevivientes de ese partido, que dejó a la Argentina eliminada y a Francia camino a los cuartos de final y rumbo al título.
Del lado argentino, están hoy presentes en el conjunto de Lionel Scaloni: Messi, Otamendi, Tagliafico, Acuña, Di María, Dybala y Franco Armani.
Messi es la gran figura, claro está, pero acompañado por piezas importantes en el primer equipo como Otamendi, referente de la defensa, Tagliafico o Acuña, que pelean el lateral izquierdo, y Di María, que tras la lesión sufrida está buscando su mejor forma y podría ser titular en la final.
Dybala no jugó en 2018 y en este Mundial lo hizo recién unos minutos en el 3 a 0 ante Croacia, por las semifinales. Armani, que disputó dos partidos en Rusia, uno de ellos ante Francia, es suplente de Dibu.
Del lado francés quedan también varios de los campeones del mundo: Lloris, Pavard, Varane, Lucas Hernandez, Griezzman, Giroud, Mbappé, Dembelé, más los dos arqueros suplentes: Steve Mandanda y Alphonse Areola.
Francia, en relación al equipo que enfrentó a la Argentina en 2018, mantiene a Lloris como capitán y referente; Varane en la defensa; Griezzman es una de las piezas más importantes de este presente de Francia, junto con el imparable Mbappé: la Albiceleste lo sufrió y mucho en ese partido de 2018.
Giroud completa el 11 inicial habitual que Deschamps pone en cancha y a diferencia de 2018, el centro delantero en Qatar se dio el gusto de anotar varios goles.
El partido de 2018 fue, tal vez, corto en cuanto el resultado. Francia fue mucho más que la Argentina, pero terminó sufriendo hasta el instante final.
Griezzman de penal, tras una falta cometida a Mbappé por Rojo, había puesto el 1 a 0 a los 13 minutos de juego. Antes ya había metido de tiro libre un remate en el travesaño.
Los especialistas en planificar el partido de la Argentina de este domingo sin dudas ya analizaron ese primer gol: la corrida de Mbappé, quien arrancó en su campo y pasó como postes a los jugadores argentinos, no puede volver a darse en esta ocasión. Todos están alertados y prevenidos.
Pero la Argentina, sin merecerlo, lo iba a empatar con un golazo de Di María a los 43; en el inicio del segundo tiempo iba a llegar el sorpresivo 2 a 1 argentino, con tanto de Mercado.
Pero Francia iba a despertarse y la alegría no duraría mucho: Pavard clavó un golazo desde afuera del área a los 56 minutos y luego iba a aparecer Mbappé en toda su dimensión para sellar con dos goles la victoria. En el cierre del encuentro, Aguero marcaría el 4 a 3 final con un muy buen cabzazo.
Y por esas cosas del fútbol, en un partido donde Francia había sido claramente superior, los de Sampaoli tuvieron una chance para empatarlo en la última jugada, aunque no pudieron definirla para llegar al alargue. Todo terminó con derrota.
Hoy, la realidad es diferente. La Argentina llega mucho mejor a este partido, a nivel grupal, individual y futbolístico, con un Messi fantástico, y sabe que no deberá regalar tantos espacios como lo hizo en Rusia.
Francia sigue siendo un rival de cuidado, también con un gran Mbappé, tal vez con menos brillo (o mejor custodiado) que en el Mundial pasado, pero con mucha efectividad.
Fuente: ESPN.