Las mismas consisten en el desarrollo de una versión de la aplicación en la que cualquier usuario va a poder enviar mensajes directos a las personas públicas a cambio de unos dólares por mensaje enviado, y posibilidad de publicar con más caracteres.
Con la cantidad que se recaude por mensaje enviado se destinaría una parte a la plataforma en sí misma y el resto para el famoso en cuestión.
Esta función debería aprobarse por la personalidad pública y la misma estaría obligada a responder estos mensajes. El objetivo es establecer nuevas funciones en la que la plataforma está trabajando para conseguir mayor rentabilidad tras la compra de la red social.
En estas novedades, existe una mejor funcionalidad de búsqueda y monetización para los creadores. Tampoco descartan publicar “tuits” con un formato largo.
Estas últimas actualizaciones mencionadas no tienen fecha, pero Musk pretende terminar con las capturas de pantalla del bloc de notas en la red social.
Hasta el momento, lo que implementó Twitter es la infraestructura para respaldar Twitter Blue, servicio que permite a los usuarios verificar su cuenta y acceder a otras funciones a cambio de ocho dólares por mes.
