Europa Press
Más de 70.000 libaneses y sirios que vivían en Líbano han huido del país, la mayoría cruzado la frontera hacia Siria, como consecuencia de la intensificación de los bombardeos israelíes, según ha denunciado el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
«La situación es difícil para los civiles devastados por los ataques aéreos israelíes en Líbano. Más de 70.000 personas han huido hasta ahora del país», ha publicado ACNUR en su cuenta en la red social X. La agencia de la ONU cita a su representante en Líbano, Ivo Freijsen, y a su representante en Siria, Gonzalo Vargas Llosa, como origen de la información sobre la «crisis creciente en la región y cómo estamos respondiendo». El sábado fue el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, quien informaba de que 50.000 personas han huido cruzando la frontera hacia Siria. Además, recordaba que «hay bastantes más de 200.000 desplazados dentro de Líbano».
Por su parte, Médicos Sin Fronteras ha denunciado que los bombardeos han afectado a «zonas densamente pobladas» del sur de Beirut. «La situación es caótica. Miles de personas, incluidos equipos de MSF, tuvieron que huir de sus hogares en la oscuridad y sin nada; algunos a pie. Muchos siguen varados en sus coches», ha informado la ONG. «La situación es desesperada y los equipos MSF trabajan sin descanso en la ciudad, distribuyendo agua, kits de higiene y mantas. Miles de personas están huyendo. Más de 500 escuelas están llenas. La gente duerme en sus coches en las calles y los hospitales están desbordados por los heridos», ha añadido el grupo. La ONG ha distribuido hasta ahora 400 kits de artículos de primera necesidad en los refugios, incluidos materiales de higiene y colchones. Equipos de la organización también están proporcionando agua y ofreciendo primeros auxilios psicológicos y continúan los trabajos de evaluación de las necesidades.