El presidente de Rusia, Vladímir Putin, con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, abordó la provocación en la ciudad ucraniana de Bucha. La información fue difundida por el servicio de prensa del Kremlin.
«Vladímir Putin informó sobre las negociaciones de los representantes de Rusia y Ucrania. Al mismo tiempo «analizó la provocación cínica y grosera del régimen de Kiev en la ciudad de Bucha», dice el comunicado. Agrega que también durante la conversación se debatieron las relaciones bilaterales.
Desde el 28 de febrero pasado, Moscú y Kiev sostienen negociaciones sobre el conflicto en Ucrania. Lo hacen tanto en formato presencial, reuniéndose en Bielorrusia o Turquía, como por teleconferencia.
Se esperaba que otra ronda de las negociaciones pudiera haberse celebrado el 4 de abril, sin embargo, debido a lo que las autoridades ucranianas y varios medios de comunicación internacionales bautizaron la «masacre de Bucha» –la supuesta matanza de civiles esa la ciudad ucraniana– esto no sucedió.
El pasado fin de semana, se difundieron numerosas imágenes en las que aparecen cadáveres de civiles, algunos maniatados, en las calles de la ciudad de Bucha, situada al noroeste de Kiev. La localidad estuvo bajo el control de las tropas rusas, que la abandonaron el 30 de marzo pasado.
Van 410 asesinatos
La fiscal general de Ucrania, Irina Venedíktova, comunicó el lunes que en total las autoridades hallaron 410 cuerpos de civiles asesinados.
Todos encontrados en la periferia de Kiev. El Ministerio de Defensa ruso calificó de montaje y «provocación» las imágenes publicadas, negando que los vecinos locales sufrieran abusos mientras la ciudad permanecía bajo el control de las tropas rusas.
