Este lunes volvió a aparecer públicamente Fabián «Pepín» Rodríguez, quien causó revuelo en la sede del Palasur, donde ocupa un puesto como representante.
La presencia de quien fuera asesor de Mauricio Macri durante su gobierno causó repudio de los presentes, en especial de los parlamentarios argentinos, quienes le exigieron que comparezca ante la Justicia de su país en el marco de la causa conocida como «Mesa Judicial M». En este proceso se indaga al abogado por presuntamente perseguir medios, periodistas y dirigentes políticos.
Desde el 8 de diciembre de 2020 la Justicia Argentina lo indaga por esta causa que investiga presiones a medios, jueces, fiscales y al grupo Índalo.
La jueza María Servini citó a Pepín a declarar en reiteradas ocasiones, pero no lo hizo. Finalmente, el abogado se quedó en Uruguay y alegó que no volvería su país dado a que la causa en realidad es una «persecución política en su contra».
La justicia declaró a Pepín en desacato y emitió una alerta de captura internacional y la Interpol emitió una alerta roja para detenerlo. Sin embargo, desde entonces, la justicia uruguaya estudia su caso, ante una solicitud de asilo político. De la decisión de la jurisdicción nacional depende la extradición o no del abogado a su país.
El revuelo en el Parlasur
Los parlamentarios Cecilia Brito (Frente para la Victoria) y Jorge Vanossi (Unidos por una Nueva Alternativa), ambos de Argentina, presentaron una acusación contra Rodríguez donde acusan al ex asesor de «inhabilidad moral» y «falta de decoro» por pretender eludir la justicia de su país.
Cuando la representante paraguaya Edit Benítez le pidió a «Pepí» explicaciones sobre su solicitud de refugio, este se apegó al discurso de la persecución.
Benítez le pregunto por la postura del la Comisión de Refugiados en Uruguay (CORE), quien consideró que el pedido del Rodríguez no cumple con los requisitos para que se le dé asilo. Ante esta interrogante, Pepín indicó que este informe no vinculante. Asimismo, dijo que ni el Ministerio del Interior ni la Justicia de Uruguay le negaron el refugio, por lo que se debe esperar.
“Es claro que Pepín no pudo negar su condición de prófugo para la justicia argentina. Por lo tanto no es un perseguido político, y tuvo que aceptar que la CORE le negó la condición de asilado. Los argentinos de bien esperamos que se presente en nuestra justicia y se defienda como tiene que ser”, dijo el parlamentario del Frente para la Victoria, Oscar Laborde.
El Palasur tendrá que juntar voto si desea expulsar a Pepín del mismo. Para destituir a un parlamentario de este órgano es necesaria una mayoría de dos tercios, es decir, 86 votos de 120.
