El Frente Amplio presentó un proyecto de ley para sancionar el “negacionismo del terrorismo de Estado” y fue la diputada Micaela Melgar, autora del proyecto, quien señaló que no se puede aceptar que se busque “cambiar la historia” e “instalar relatos que son el relato de la dictadura”.
El cometido del proyecto es sancionar “cualquier declaración o manifestación pública que niegue, justifique o minimice las consecuencias de crímenes de lesa humanidad cometidos por el accionar ilegítimo del Estado en el período comprendido entre el 13 de junio de 1968 y el 26 de junio de 1973” y en el período comprendido entre el 27 de junio de 1973 y el 28 de febrero de 1985, es decir, la última dictadura cívico-militar.
Los que realicen este tipo de manifestación, en el proyecto se prevé que deberán “corregir el sentido de sus afirmaciones, retractándose en el mismo espacio público en que hayan sido vertidas”, y reivindicar “el valor de la información recabada científicamente y reparando el daño a la memoria histórica de las víctimas de dichos crímenes”. De no hacerlo, la persona “será castigada con siete a 30 días de prestación de trabajo comunitario, abocado específicamente a tareas de señalización, reparación y mantenimiento en Sitios de Memoria Histórica”, marca el cuarto y último artículo del proyecto.
El proyecto de ley ingresó a la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Representantes, de la mano del Frente Amplio (FA).
Pensar en legislar acerca del negacionismo da cuenta de todo lo que se necesita avanzar en materia de derechos humanos y pasado reciente. Exigir que la causa de los compatriotas detenidos-desaparecidos por el Terrorismo de Estado, sea una politica de Estado es imperioso para no repetir errores.
Y entonces qué medidas tomaremos con el gobierno que permitió meteóricas carreras a militares acusados de gravísimas violaciones a los derechos humanos? O con el gobierno que salió a voz en cuello a defender a los asesinos de Berríos? SOLO HAY QUE TENER MEMORIA.
Muchos que salieron a buscar el voto de la gente, reciclados como demócratas en 1983 en adelante ahora sin el más mínimo rubor denuncian el revisionismo, «tienen ojos en la nuca» proclaman y se abrazan literalmente con genocidas y fascistas, al tiempo que se declaran de «centro». Por favor! Si obran como fascistas, por qué les da vergüenza manifestar que son de ultra derecha?
Con el enano al frente la consabida foto de falta de respeto al parlamento y a los ciudadanos