El pescado es una fuente de minerales que pueden beneficiar al cuerpo con una gran serie de fósforo, potasio, sodio, calcio, cobalto, magnesio, hierro, yodo, flúor, zinc y vitaminas cómo la A, B1, B2, B3, B12, D y E. Este alimento, contiene ácidos grasos poliinsaturados omega 3 conocidos como DHA y EPA que son indispensables para el desarrollo normal del cerebro de las personas desde que son niños y niñas.
Este alimento suele ser la estrella del menú de “Semana Santa”. Pero además de formar parte de los platos tradicionales de temporada, muchos de ellos son buenos para la salud, según los expertos.
Miles de personas en todo el mundo tienen la costumbre de comer pescado durante la Cuaresma o el Viernes Santo (la víspera de Pascua para los cristianos). Pero este alimento forma parte de la dieta habitual de muchas personas independientemente de la época del año, la tradición o las creencias. Y lo mejor: los expertos afirman que incluir pescado en la ingesta es bueno para la salud.
Según un artículo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), el pescado es una proteína animal de alta calidad y una gran fuente de ácidos grasos omega-3, además de ser rico en otros nutrientes como vitamina D, vitamina B2 (riboflavina) y selenio.
El pescado es un componente importante de una alimentación sana, aseguran los estudiosos de Harvard, que también destacan los beneficios de incluir pescado en la dieta por su riqueza en nutrientes. Además, como existe una enorme variedad de pescados de agua dulce y salada, con distintos sabores y estilos de cocción, su consumo se convierte en una opción alimentaria para todos los gustos.
Comer pescado también puede ser una buena alternativa para aquellos a los que no les gusta o no quieren comer carne roja, ya que puede aportar una amplia gama de beneficios para la salud al tiempo que es bajo en grasas saturadas.
Uno de los beneficios, es que este alimento reduce el riesgo de cardiopatía; según la Universidad de Harvard, existen pruebas fehacientes de que comer pescado es bueno para la salud del corazón y los vasos sanguíneos.
Esto se debe a que comer pescado contribuye de varias maneras, ya que las grasas omega-3 protegen el corazón contra el desarrollo de trastornos erráticos y potencialmente mortales del ritmo cardíaco, explica el artículo de Harvard.
Además, según un artículo publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina del Gobierno de Estados Unidos, el alimento proveniente de mares y ríos, disminuye los niveles de triglicéridos en sangre.
Las personas con enfermedades cardiovasculares que comen pescado con regularidad presentan un número significativamente menor de episodios graves y un menor número de muertes en comparación con las que no comen pescado, entre los datos recogidos de más de 190.000 personas de 58 países.
Una de las razones de este resultado positivo se debe a que los nutrientes del pescado también mejoran el funcionamiento de los vasos sanguíneos y, en dosis más elevadas, reducen los niveles de triglicéridos en la sangre, por lo que pueden aliviar la inflamación.
Finalmente, los nutrientes del pescado, ayuda a la presión arterial y la posible formación de placas de grasa en las arterias. El consumo regular de pescado también ayuda a reducir la presión arterial y la formación de placas de grasa en las arterias, de acuerdo con la Universidad de Harvard.
Esto, se debe a que ingesta continuada de pescado con alto contenido en omega-3 ayuda a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y triglicéridos y, en consecuencia, también disminuye la posibilidad de que se formen placas de grasa en las arterias, otro beneficio para reducir las posibilidades de sufrir un infarto.
