La iniciativa se da en el marco del reclamo de la industria aviar nacional por el ingreso al mercado uruguayo del pollo trozado. Según los productores estas importaciones compiten de forma desigual con el de Uruguay e incide en los costos de producción, distribución y venta.
La minuta de artículo único dice los siguiente: “La Cámara de Senadores solicita al Poder Ejecutivo que disponga la vigencia de los convenios existentes desde 2010, entre las Cámaras Empresariales, y que establecían una cuota máxima de 120 toneladas mensuales de pollo entero congelado desde Brasil y 60 toneladas para Argentina”.
En la exposición de motivos los senadores de la oposición expresan que “la gran desigualdad de volúmenes producidos en Brasil y Uruguay ponía en gran riesgosa toda la industria avícola uruguaya y ese mismo año 2010, se acordó y se firmó un acuerdo entre cámaras empresariales de Brasil y Uruguay, por el cual se permitía introducir desde Brasil una cuota máxima de 120 toneladas mensuales de pollo entero congelado”.
En el pedido al gobierno, los legisladores explican que “los volúmenes de carne aviar importada, sin límites y producida con costos más bajos que en nuestro país por el mayor productor y exportador de carne aviar del mundo (Brasil), compite y desplaza a la carne aviar producida por nuestras industria”.
El gobierno había flexibilizado las importaciones de pollo buscando controlar la inflación.
