El balance de emigrantes muertos en el asalto de este viernes a la valla de Melilla asciende a 18 personas, según informaron fuentes de las autoridades locales de la provincia marroquí de Nador, contigua a la ciudad española ubicada en el norte de África.
Melilla es una ciudad autónoma española situada en el norte de África, a orillas del mar Mediterráneo. Tiene una valla que la separa de Marruecos. Quienes la pueden pasar pueden pedir asilo en territorio español. El intento de cruzar la valla que separa el país magrebí de Melilla comenzó pasadas las seis de la mañana de ayer, cuando alrededor de 2.000 personas de origen subsahariano empezaron a aproximarse a la frontera y se encontraron con un amplio dispositivo montado por Marruecos. A pesar de los esfuerzos de los agentes marroquíes, dos horas después unos 500 subsaharianos consiguieron llegar a la valla y rompieron una puerta de acceso, tras lo cual comenzaron a entrar a Melilla. Según la Delegación del Gobierno de la ciudad, 133 de ellos lo consiguieron.
En el primer balance de cinco emigrantes muertos, las autoridades marroquíes afirmaron que los fallecidos habían sido arrastrados por la multitud en una avalancha o bien habían muerto al caer de un muro. Las mismas fuentes contabilizaron 76 emigrantes y 140 agentes marroquíes heridos, cinco de estos últimos de gravedad. Todos los heridos, tanto agentes como emigrantes, fueron trasladados al Hospital Hassami de Nador y al centro hospitalario universitario de la ciudad de Oujda para recibir tratamiento.
De la dureza del choque vivido esta mañana dan cuenta algunas imágenes que circulan por las redes que muestran a policías marroquíes lanzando gases lacrimógenos y piedras contra un grupo de migrantes que atraviesan una valla en territorio alauí. También un vídeo de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) documenta un gran número de migrantes tendidos y amontonados en el suelo bajo la vigilancia de la Policía marroquí.
En el lado español, el Gobierno informó de que 133 personas de origen subsahariano consiguieron acceder a Melilla de las que 106 resultaron heridas. Hay 49 agentes de la Guardia Civil y 57 inmigrantes heridos, de los cuales tres tuvieron que ser trasladados al Hospital Comarcal de Melilla, según informan las autoridades españolas. Fuentes de la Delegación del Gobierno en Melilla han informado de que las lesiones que han sufrido los guardias civiles son de carácter leve, salvo complicación. Además, cuatro vehículos han sufrido daños en carrocería y rotura de lunas por el lanzamiento de piedras.
La entrada masiva se produce apenas dos meses después del giro histórico de posición del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre el Sáhara Occidental, que provocó la normalización de las relaciones entre España y Marruecos.
La acción se produce asimismo en vísperas de la cumbre de la OTAN en Madrid, prevista para el 29 y 30 de junio, motivo por el que se han extremado las medidas de seguridad. En esa reuniòn al más alto nivel España plantea precisamente que la Alianza Atlántica garantice la seguridad de Ceuta y Melilla ante las «amenazas del flanco sur». Desde primera hora de la mañana, la Delegación del Gobierno en Melilla ha destacado la «colaboración activa» de las fuerzas de seguridad marroquíes, con las que, asegura, se ha trabajado «coordinadamente» para intentar frenar el acceso de los migrantes. El Gobierno ha puesto tanto énfasis en esta colaboración que, tras participar en el Consejo Europeo celebrado en Bruselas, el propio Sánchez, que atribuye el salto a «las mafias que trafican con personas», ha hablado de «extraordinaria cooperación».