El cubano Gabriel Rosillo se alzó con la medalla de bronce en los 97 kg de la lucha grecorromana en los Juegos Olímpicos de París 2024, luego de vencer por 2-0 al uzbeco Rustam Assakalov, quien se retiró del combate a los pocos minutos de haber comenzado por lesión.
El oriundo de Santiago de Cuba se presentó en la Champ-de-Mars Arena en busca de su primera medalla olímpica. Rosillo de 25 años se puso en ventaja temprano en el combate, tras una acción donde sumó dos puntos. En la caída, Assakalov sufrió una lesión en el hombro derecho que le impidió continuar en competencia.
Con el combate finalizado, el uzbeco, de 40 años, dejó sus zapatillas en la colchoneta, un gesto que anuncia el retiro de un luchador. Gabriel Rosillo se ubicó en el puesto 13 en su debut olímpico en Tokio 2020. Llegó a París 2024 luego de coronarse campeón mundial en Belgrado 2023 y de ganar su segundo oro en los Juegos Panamericanos en Santiago.
El cubano había caído en las semifinales el martes 6 de agosto ante el armenio Artur Aleksanyan, oro en Río 2016 y plata en Tokio 2020, en un combate que replicó la final de dicho mundial. Sin embargo, el final de la historia de Rosillo en París 2024 fue un final feliz: con un subcampeonato olímpico y una medalla de plata colgada del pecho.
Así Rosillo se convirtió en el segundo luchador de Cuba en colgarse una medalla en París 2024, después de que la leyenda Mijaín López se llevara su quinto oro en cinco Juegos Olímpicos consecutivos, en la categoría grecorromana 130 kg.
Lo celebro porque son latinoamericanos. Claro, alguno dirá, sí, pero son cubanos…