Las fuerzas israelíes han llevado a cabo cinco nuevos ataques a gran escala en la Franja de Gaza, resultando en al menos 62 muertos y 147 heridos, según reportes de las autoridades sanitarias locales. Con esta jornada, el número total de víctimas mortales desde el inicio del conflicto el 7 de octubre de 2023 ha alcanzado los 43,665, mientras que los heridos superan los 103,000. A esto se suma el hecho de que decenas de personas continúan atrapadas bajo los escombros, sin que los equipos de emergencia puedan acceder debido a las intensas hostilidades.
La situación en el norte de Gaza es especialmente grave. Cerca de 100,000 personas han sido desplazadas hacia la ciudad de Gaza, mientras que otras 75,000 siguen atrapadas sin acceso a alimentos, agua ni atención médica. La población civil vive atrapada entre los bombardeos y el bloqueo, lo que empeora la crisis humanitaria.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, ha señalado que alrededor del 70% de las víctimas en Gaza son mujeres y niños, lo que pone de manifiesto el carácter desproporcionado de los ataques. Además, el Ministerio de Educación de Palestina informó que más de 12,000 estudiantes han muerto y casi 20,000 han resultado heridos desde el inicio del conflicto.
La situación se está tornando cada vez más insostenible, con miles de civiles atrapados en una zona de guerra, enfrentando una escasez crítica de recursos básicos, mientras los esfuerzos para brindar asistencia humanitaria continúan siendo insuficientes ante la magnitud de la tragedia.
