La denuncia se presentó en marzo de 2022, cuando el acusado tenía 14 años. Los familiares y los maestros de la escuela a la que asistía la niña tomaron conocimiento de los posibles abusos y trasladaron a la víctima a un centro de asistencia, donde una profesional de la salud presentó la denuncia en la Unidad de Violencia Doméstica.
Las investigaciones incluyeron testimonios de educadores, de la familia y peritajes a la menor, las cuales concluyeron que el autor, quien es tío de la niña, cometió reiteradas infracciones “gravísimas a la ley penal tipificadas como reiterados delitos de abuso sexual agravados, en calidad de autor”.
Como medida cautelar, se le impuso al adolescente una pena de 15 meses de medidas socio-educativas no privativas de libertad, que incluyen la prohibición de comunicación por cualquier medio hacia la víctima y la obligación de fijar domicilio.
Además, se le ordenó continuar con un tratamiento psicoterapéutico en la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) para abordar su situación y asistir al Programa de Medidas Socioeducativas Comunitarias (Promesec) una vez por semana para trabajar en su responsabilidad en los hechos denunciados.