El pasado viernes 27 de diciembre Ancap y la empresa de combustibles sintéticos HIF Global, firmaron un acuerdo de implementación para avanzar en el proyecto de una planta de hidrógeno verde y combustibles sintéticos en Paysandú. Este acuerdo implica que desde Alcoholes del Uruguay (ALUR) «vendan» 150.000 toneladas de las 900.000 de anhídrido carbónico (CO2) que requerirá el proyecto.
La planta demanda una inversión estimada de US$ 6.000 millones y calculan que producirá 700.000 toneladas anuales de combustibles renovables para exportación. Este acuerdo se firma luego de la discusión en el gobierno por el rol de la estatal Ancap en el proyecto. El ex presidente de la institución, Alejandro Stipanicic promovía ser socios con el 30% en el proyecto, pero la ministra de Industria, Energía y Minería, Elisa Facio y el vicepresidente de Ancap, Diego Durand, lo consideraban inconveniente por el compromiso económico que comprendía. En esa misma línea el Poder Ejecutivo exhortó a la institución a renunciar a la participación en el proyecto justificando determinados riesgos económicos para el Estado uruguayo.
Actualmente el proyecto de HIF espera la resolución final del cambio de uso de suelo del terreno y su posterior Viabilidad Ambiental de Localización (VAL). Al mismo tiempo las partes avanzan en la elaboración del Estudio de Impacto Ambiental (ESIA) y en la ingeniería de detalle de la planta, e infraestructura de servicios y accesos.
Aporte al país
Durand explicó que «desarrollamos un proyecto en cooperación para dinamizar la economía», con la generación de 3.500 empleos en la etapa de construcción y unos 400 en la operativa. que es histórico porque ubica al país a la vanguardia mundial. «Esta alianza representa un nuevo paso clave para el desarrollo de una industria de combustibles sostenibles en Uruguay para exportación, fortaleciendo la estrategia y posicionando a nivel mundial a Grupo ANCAP como impulsor de proyectos que generen valor económico y ambiental a nivel local y global» en marco de un país que «es admirado en el mundo en materia de vanguardia y sostenibilidad en proyectos verdes», con más del 97% de su matriz eléctrica de origen renovable.
Por su parte la ministra Facio recordó que el proyecto llevó muchos años de trabajo y que se suma a otras acciones previas, como la ruta del hidrógeno verde impulsada por la administración, con el objetivo de descarbonizar el resto de las energías que se consumen. «El hidrógeno será sustentable o no será», expresó.
Respondiendo a su postura sobre no invertir en el proyecto, explicó que «invertir en un 10% serían US$ 600 millones; que es el 1% del presupuesto nacional y lo que hace muchísimos años la Universidad de la República está reclamando como presupuesto». Ante esto, analiza que «si yo tuviera la posibilidad de elegir, no elegiría poner US$ 600 millones en este proyecto» pese a que defiende que es un proyecto que «estoy segura va a dar muchas cosas buenas para el país», pero entiende que «no es una prioridad para el Estado uruguayo. Sería más saludable ponerlo en otras cosas como, por ejemplo, el presupuesto de investigación», añadió.
Combustibles sustentables
Los e-combustibles que se producirán son aquellos combustibles sintéticos que se elaboran a partir de energía renovable y anhídrido carbónico reciclado de fuentes industriales o biogénicas o directamente de la atmósfera. Por su compuestos químicos, equivalen a los combustibles convencionales actuales, permitiendo su utilización en autos, barcos y aviones, sin necesidad de modificar motores ni infraestructura.
La empresa HIF Global se encuentra en América, con una planta en Chile y está desarrollando proyectos de escala comercial en Estados Unidos, Uruguay, Chile, Brasil y Australia.
Postura de la futura ministra de Industria
En entrevista con M24 la ministra designada Fernanda Cardona, expresó que el actual Poder Ejecutivo debería explicar por qué se retira del negocio y decide mantener las obligaciones comprometidas por las empresas públicas, como la compra directa de energía por parte de UTE a HIF Global, «al doble del costo establecido por el actual Poder Ejecutivo en la Hoja de Ruta del Hidrógeno Verde.
«¿Por qué tenemos que asumir ahora una obligación de compra a un precio determinado cuando el propio Poder Ejecutivo dice que podría valer la mitad dentro de cinco años?», cuestionó
Perdieron pero se apuran a firmar proyectos.
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Tendrá una capacidad de producir 800 toneladas al año de H2V, de bajas emisiones.
Se ha llevado a cabo una inversión de 28,5 millones de dólares.