El hecho ocurrió en el segundo piso de la Oficina Penal Centralizada (OPEC) –ubicada sobre la calle Juan Carlos Gómez– donde la persona esperaba en reclusión por una audiencia donde recibiría imputación por un delito de rapiña.
De acuerdo con lo indicado por fuentes de la Fiscalía, la fiscal de la causa, Silvia Naupp, llegó a un acuerdo con el hombre para que recibiera condena mediante un procedimiento abreviado, el cual implicaba varios años de prisión para el sujeto poseedor de 10 antecedentes penales.
Sin embargo, mientras esperaba el hombre le pidió a sus custodios permiso para ir al baño, por lo que estos le quitaron las esposas y abrieron su celda. El detenido aprovechó estar solo, bajó a planta baja y huyó del sitio por la puerta principal sin resistencia, debido a que los molinetes dispuestos allí estaban dañados desde hace meses. Una vez fuera del recinto judicial el hombre huyó en un taxi.
De acuerdo con el vocero de la Suprema Corte de Justicia, Raúl Oxandabarat, el fugitivo vestía un pantalón “muy colorido”.
El juez de la causa, Alejandro Asteggiante, dio constancia de la fuga en los expedientes. Por otro lado, se tomó declaración a los policías que realizaban labores de custodia y se instruyó una investigación de urgencia.
