El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha amenazado a las empresas petroleras con impuestos más altos sobre sus ganancias excedentes si no trabajan para reducir el precio de la gasolina en el marco de la crisis económica.
«Sus ganancias son ganancias inesperadas de la guerra», ha recalcado el mandatario estadounidense, agregando que «es hora de que estas empresas dejen de especular» en el marco de la invasión rusa de Ucrania, que ha provocado una subida de los precios de la energía a escala mundial.
Estos comentarios se producen días después de que las compañías petroleras más grandes del mundo, las estadounidenses ExxonMobil y Chevron, cerraran el tercer trimestre de 2022 con fuertes incrementos de sus respectivas ganancias.
En el caso de ExxonMobil, el beneficio neto atribuido entre julio y septiembre alcanzó los 19.660 millones de dólares, casi tres veces más que un año antes. De su lado, las ganancias netas de Chevron en el tercer trimestre de 2022 se dispararon hasta los 11.
231 millones de dólares , un 83,8 por ciento más que en el mismo periodo de 2021.
Es poco probable que los comentarios de Biden del lunes conduzcan, según ha recogido el diario ‘The Washington Post’,a la aprobación de una nueva ley, pero marcan la culminación de meses de debates internos dentro de la Administración sobre cuál puede ser la mejor respuesta a los altos precios de la gasolina.
Biden, que no ha entrado en detalles sobre el posible impuesto a las petroleras, ha dicho que trabajará con el Congreso para analizar estas y otras opciones a escasos días de la celebración de las elecciones de medio mandato.