Vivimos en tiempos históricos en los que se están gestando importantes cambios en la visión geopolítica del mundo, en el cual, aparecen nuevos mecanismos de intercambio comercial como es el BRICS, creado como un grupo y foro político y económico de países emergentes, conformado en la actualidad con 9 miembros de pleno derecho: Rusia, Brasil, India, China, Sudáfrica, Egipto, Irán, Etiopía Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, asi como también, se han incorporado 13 Naciones, como países socios: Argelia, Bielorrusia, Bolivia, Cuba, Indonesia, Kazajstán, Malasia, Nigeria, Tailandia, Turquía, Uganda, Uzbekistán y Vietnam. Cada vez más países solicitan la incorporación.
El BRICS, se vislumbra, como una nueva herramienta comercial, pero es a la vez un proyecto mucho más ambicioso, que se aglutinan como un bloque, porque incluye otras perspectivas defensoras del multilateralismo y de un mundo “pluripolar”, en contraposición, o rechazo a las medidas coercitivas unilaterales impuestas por EEUU y las naciones europeas.
Entre otros cometidos, el BRICS promueve una forma distinta de interrelacionamiento entre Naciones, con igualdad de oportunidades de crecimiento de la Balanza Comercial de los distintos países, con una mirada horizontal hacia todos los Estados, que constituye un contrapeso, o alternativa al denominado grupo “G7”, integrado por: Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unidos con la égida y centralidad de EEUU, el cual responde a intereses del otro Bloque…
Ahora bien, ante esta nueva herramienta, surgen dos preguntas necesarias: ¿En qué radica la importancia del BRICS?, al mismo tiempo que nos planteamos ¿Qué relación puede tener Uruguay como país con necesidad de crecimiento económico con el citado instrumento?. Intentaré expresar mi perspectiva en este asunto.
En cuanto a la importancia de este acuerdo multilateral, la misma radica en la visión integradora y humanista que se imprimió al vínculo entre los Estados del Planeta, la cual no nace ahora, sino que nace como una respuesta histórica, a la visión unipolar y hegemónica del Mundo imprimida desde Washington, fortalecida en la impronta de una contraposición global de intereses que separan al mundo en dos visiones o dos bloques. El BRICS recoge en su esencia y motivación aquellos principios y valores históricos, que en su momento fueron impulsados por la “Tricontinental” con figuras relevantes como Fidel en Cuba; por Josif Tito en Yugoslavia entre otros .. movilizados por el afan común de lograr establecer un equilibrio e igualdad de oportunidades, a través de un indicador que hermana a los pueblos del mundo de manera intercontinental, propiciando la paz, el entendimiento y el respeto recíproco a través del socialismo como camino, otorgando oportunidades a países en desarrollo impensadas con anterioridad.
A partir de el acuerdo BRICS, la visión unipolar del mundo, que tiene como centralidad a Estados Unidos, se ve desplazada del escenario geopolítico, emergiendo este instrumento como una forma alternativa de relacionamiento entre Estados, a partir de un concepto mucho más abarcativo, democrático y omnicomprensivo del mundo sin la subordinación unidireccional que ejerció Estados Unidos, la cual responde a intereses ideológicos y económicos propios de la supremacía, con una mirada omnipotente y de imperio frente al resto de las Naciones.
La visión hegemónica, pertenece al pasado. Supo fortalecerse a partir de una coyuntura crítica, como fue la implosión y caída de la Unión Soviética, la cual fue utilizada por EEUU, para imponer su omnipresencia y dominación, digitando por un lado: alianzas con países poderosos que le eran pertinentes, (entre ellas el grupo denominado G7), cuyo poderío hoy por vía de los hechos, día a día pierde fuerza en su PIB mundial, frente al grupo BRICS que dio un paso importante en su crecimiento.
Es importante resaltar que en el año 2023, el bloque BRICS representó más del 45% de la población del Mundo, casi el 36% del PIB mundial, sobrepasando el 30 % del G7, no siendo éste el único ámbito en que ha enfrentado mayores desafíos. Según datos del FMI, los BRICS están a la cabeza en cuatro áreas críticas: la proporción del poder adquisitivo, la proporción de la población mundial, la producción mundial del petróleo y sus respectivas contribuciones al crecimiento económico mundial.
Por otro lado, EEUU, históricamente fue la potencia que impuso las reglas del comercio internacional a nivel mundial, a través de organizaciones como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional después de la II Guerra Mundial. La realidad hoy imperante nos muestran que este escenario ya no es el preponderante.
Cuando me refiero al FMI, todos sabemos de lo que estoy hablando, porque padecimos en carne propia las penosas consecuencias de las políticas que impusieron a los países del sur global y los términos de los acuerdos leoninos celebrados, sin alternativas por éstos, debiendo soportar intromisiones por vía de los hechos en la política interna con revisiones y ajustes periódicos de la deuda contraída.
Los resultados de esta estrategia fueron sin lugar a duda, el mayor endeudamiento y empobrecimiento de países ya pobres, que repercutieron con la injerencia en sus economías internas, imponiendo desequilibrio en los términos de los acuerdos y exigencias, que notoriamente limitaron el crecimiento sustentable de los países obligados a recurrir a su “ayuda” financiera.
La mirada de estos nuevos tiempos, propiciada por Rusia, es sin duda alguna muy distinta, es amplia y abarcativa, es más democrática, permitiendo fortalecer la balanza comercial interna de los Estados, imprimiendo un giro cuali cuantitativo diferente y auspicioso para la colocación de materias primas y productos de exportación, posibilitando el crecimiento genuino de países como el nuestro que apuestan al crecimiento de sus economías.
No es menor señalar que desde el año 2015, El Brics tiene su propio Banco, “Nuevo Banco de Desarrollo”, que nace como una alternativa al Banco Mundial y al FMI. Se trata de un Banco Multilateral, creado por los países del grupo, con el objetivo de movilizar recursos para financiar proyectos de desarrollo sostenible, e infraestructura en países en desarrollo y mercados emergentes.
El Banco de BRICS ya ha realizado importantes inversiones en infraestructura en el mundo. En Latinoamérica, invirtió para proyectos de mejora de redes de transporte en Brasil, como el “Corredor de Maranhao” y el “Proyecto de Infraestructura de Transporte de la Región Norte” con el objetivo de facilitar la llegada de bienes a puertos regionales y facilitar el comercio.
En dicho marco, se torna como un hecho relevante para el mundo y en especial para Latinoamérica, la reciente Cumbre celebrada en la ciudad Rusa de Kazan, en el mes de octubre del corriente año, convocada por el presidente de Rusia Vladimir Putin, en la cual participaron mandatarios de más de casi 40 países.
El tema central de la convocatoria fue “El fortalecimiento del multilateralismo para un desarrollo y una seguridad globales y equitativos”, lo que refleja en forma manifiesta los anhelos de los países, en especial de Latinoamérica, que ocupó un lugar destacado en la Cumbre, lo cual implica una mirada de justicia y desarrollo. Decimos esto dado que además de la reunión de los 9 miembros de pleno derecho, se dedicó una Sesión especial denominada “Brics más /Outreach” cuyo tema central fue los “Brics y el Sur global:construir juntos un mundo mejor. Incorporando, a partir del 2025 nuevos socios como Bolivia y Cuba.
La trascendencia de la Cumbre se desprende, porque además de la multitudinaria convocatoria contó con la presencia del Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, cuestionada por Ucrania, aferrada a una visión del mundo belicista y egocentrista, que notoriamente responde al esquema hegemónico y unipolar que propicia EEUU, a través de la UNION EUROPEA y la OTAN.
Guterres, en su participación,destacó la la importancia de esta alianza comercial expresando: “La organización intergubernamental BRICS puede desempeñar un papel muy fuerte en el fortalecimiento del multilateralismo para el desarrollo y la seguridad global”, lo que indica que no se trata de una utopía sin sentido, sino de una realidad que se fortalece y abre paso a otras oportunidades inexistentes en el viejo esquema imperante.
La Cumbre del BRICS en Kazan constituyó un avance que ratifica el desplazamiento de la hegemonía unipolar del mundo, la cual retrocede y da paso a una visión ampliada; consolida a paso firme como instrumento comercial real, nuevo y alternativo, como “una asociación de mercados emergentes de países en desarrollo, basada en lazos históricos de amistad, solidaridad e interés compartidos” con cuya finalidad fueron creados. Estamos frente a un nuevo escenario muy alentador.
Esta es una nueva alternativa para el crecimiento de la Balanza Comercial de países en desarrollo nada despreciable, dado que garantiza una participación basada en el respeto recíproco, enfocada en otorgar nuevas oportunidades; de abrir nuevos mercados de intercambio en una forma igualitaria y diferente, fortaleciendo el comercio interno. En esta dirección Noam Chomsky expresó: “Es esta otra visión del mundo, con centros de poder independientes que cooperan entre sí y se acomodan entre sí y no están en conflicto entre ellos. Existe una posibilidad de que esta visión se pueda implementar en América Latina, podría jugar un papel importante en llevarlo a cabo”.
¡Los progresos ya se están viendo!
Considero que la incorporación de Uruguay al BRICS es una oportunidad y un verdadero desafío, que requiere una mirada amplia y una política independiente y de brazos abiertos a nuevas alternativas de fortalecimiento de vínculos amistosos y comerciales con los distintos países del mundo.
Esto es esencial para impulsar proyectos de infraestructura y el crecimiento en países como el nuestro. Asumir una actitud prescindente, reticente o distante, sería no sólo perder una oportunidad de crecimiento y más que un error, diría yo, un verdadero pecado capital!.
Finalmente, dejo un fragmento de las palabras del Presidente de Rusia en la Cumbre de Kazan, las cuales contextualizan la importancia del tema.
“En Kazan confirmamos que el BRICS no es un formato cerrado en sí mismo, sino que está abierto a aquellos que comparten los valores del BRICS, y sus miembros están dispuestos a trabajar sin dictados externos ni internos de imponer a nadie solo unas pocas aproximaciones estrechas”
“ Es importante elaborar mecanismos alternativos multilaterales fiables y libres de cualquier tipo de dictado, así como cadenas de suministros, establecer intercambio de tecnología y mejores prácticas, desarrollar y aumentar la mayor capacidad de tráfico a través de corredores de transporte internacionales..” “en el marco del BRICS iniciamos la creación de un mercado bursátil de trigo, esperamos que este mecanismo contribuya al establecimiento de un comercio transparente e invulnerable frente a los riesgos externos de bienes agrícolas. Rusia está dispuesta a trabajar con todos los países incluidos los del Sur y Este global para promover el desarrollo inclusivo con el fin de crear un mundo mejor.”
(Fragmento del discurso del Presidente Vladimir Putin en la Cumbre de Kazan).
