Este martes tras múltiples suspensiones de la audiencia, la Justicia uruguaya dictó sentencia para el antisocial que prendió en fuego a Andrés Bargas, un hombre en situación de calle mientras dormía en una calle de Ciudad Vieja.
El hecho sucedió el 15 de julio de 2020, cuando la víctima descansaba en un espacio de la calle donde solía dormir. Hasta ahora no se supo cuáles fueron los motivos que impulsaron al delincuente a cometer dicha acción.
Este martes se realizó la audiencia luego que en tres ocasiones esta se suspendiera a último momento ante la imposibilidad de trasladar al imputado al juzgado. Finalmente, la fiscal de Homicidios de 2º Turno, Mirta Morales, acordó con la defensa del imputado la realización de un procedimiento abreviado. Los delitos por los que se condenó al agresor, de 25 años de edad, fueron homicidio en grado de tentativa y receptación. Por estos crímenes deberá cumplir una condena de cinco años y ocho meses de prisión efectiva.
La víctima, por su parte, sufrió graves lesiones que le causaron un daño irreparable a su salud. Tras estar más de un año en CTI, entre otras secuelas, Bargas quedó con problemas de audición y perdió nueve dedos, los cuales debieron amputársele.
La hermana de Bargas lo acompañó hasta la sede judicial y conversó acerca de su estado actual. Entre otras cosas, dijo que Andrés “ya sale un poco a caminar a la calle”, pero manifiesta que “se siente inútil”. Además, indicó que muchas veces se pregunta por qué le pasó esto. A su vez, explicó que su deseo era “ver la cara del imputado”.
El condenado se encuentra actualmente en prisión preventiva por una medida cautelar relacionada con un delito de droga y hurto. A partir de octubre será el sujeto comenzará efectivamente a cumplir la condena por la agresión a Bargas.