La Institución Nacional de Derechos Humanos (Inddhh) señaló que en el caso del suicidio de Milagros Chamorro, hubo “un conjunto de omisiones e incumplimientos” por el CASMU y por el Ministerio de Salud Pública.
El mismo estudio afirma que la joven consultó tres veces a su prestador de salud «entre el 23 y el 25 de octubre» y que «en ninguna» de ellas «fue valorada por un médico psiquiatra».
Según la institución, el Ministerio de Salud Pública (MSP) «tiene la obligación de actuar de forma inmediata y efectiva ante situaciones como en el presente caso». Entre otras falencias señalan «la demora en la respuesta» y «podrían implicar un incumplimiento de las obligaciones asistenciales definidas por el MSP».
El Instituto Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) emitió un informe en el que concluye que el caso de Milagros Chamorro, quien se quitó la vida en octubre de 2024, estuvo precedido por “omisiones” e “incumplimientos” de las instituciones de salud, en particular del Ministerio de Salud Pública y del Casmu.
Las fallas institucionales incluyen deficiencias en las prestaciones médicas y en la fiscalización de las mismas. En concreto, el informe menciona que “el suicidio de Milagros Chamorro estuvo precedido de un conjunto de omisiones e incumplimientos en las prestaciones de salud brindadas por el Casmu y la fiscalización de las mismas”.
Además, el informe destaca una serie de errores asistenciales que se manifestaron en diferentes etapas del proceso: «subvaloración del riesgo, falta de supervisión adecuada, ausencia de interconsultas psiquiátricas oportunas, registros incompletos y protocolos poco claros o no aplicados».
En lo que respecta a la atención médica, el estudio indica que la joven consultó al prestador de salud en tres ocasiones, entre el 23 y el 25 de octubre; sin embargo, en ninguna de estas visitas fue evaluada por un médico psiquiatra.
La INDDHH también hace hincapié en la necesidad de que el Ministerio de Salud Pública (MSP) refuerce los mecanismos de control y sanción destinados a las mutualistas, asegurando así la atención psiquiátrica adecuada para personas que presentan ideación suicida. Al mismo tiempo, sugiere que la Fiscalía implemente “lineamientos de comunicación apropiados, ya sea de manera presencial o telefónica, con el apoyo psicosocial necesario ante el archivo de denuncias que puedan tener un alto impacto emocional”.
Es verdad que hay que fiscalizar el funcionamiento adecuado de las mutualistas También en ASSE tener en cuenta que faltan psiquiatras y el MSP deberían alentar el nombramiento de especialistas en el interior de alguna manera
Pero éste es el último eslabón de la cadena La depresión profunda causante del suicidio empieza con el maltrato infantil Que pasó en esa familia? Los psicológicos de ANEP y de los CAIF deben estar alertas a las señales de maltrato, tanto de los padres como de bullying Hacer seguimiento y hacer jornadas de prevención Hay que actuar antes
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