La fase de grupos de la Conmebol Libertadores arrancó y los equipos uruguayos comienzan su andar en esta edición 2024, el camino para llegar a la gran final en Buenos Aires no será sencillo pero confían en la preparación y la experiencia para avanzar más allá de la fase de grupos.
El primero en debutar será Nacional, luego de avanzar desde la fase dos de la copa, teniendo en el camino una exigente llave ante Always Ready, quedó encuadrada en el difícil grupo H, junto a River Plate de Argentina, Deportivo Táchira de Venezuela y Libertad de Paraguay. Precisamente este último será su rival esta tarde en el Gran Parque Central de la Blanqueada a las 19 horas.
Los dirigidos por Álvaro Recoba, vienen de empatar a cero contra su clásico rival de visitante y parece no terminar de conseguir el ritmo futbolístico deseado, el tricolor quedó afuera de la Copa Uruguaya en octavos de final, mientras que en el Apertura ha conseguido dos victorias y cuatro empates en 6 fechas.
El tricampeón de la Libertadores buscará en su participación número 51 el cuarto título para la institución, en los últimos cuatro años el club llegó a los cuartos de final en el 2020, octavos de final en la edición pasada; mientras que en el resto no pudo avanzar de la fase de grupos.
Luego será el turno de Peñarol, el carbonero marcha líder en el torneo doméstico con 16 puntos y todavía siguen con vida en la Copa Uruguay, los dirigidos por Diego Aguirre están en un grupo muy parejo en la previa.
Integra el grupo G con Caracas de Venezuela, Atlético Mineiro de Brasil y su primer rival Rosario Central de Argentina, que reciben a los uruguayos en el estadio Gigante de Arroyito en la ciudad de Rosario; este jueves 4 de abril a las 19 horas.
En su último partido frente a Nacional de local, no pudo demostrar el poderío ofensivo que viene deslumbrando y el empate fue con un sabor amargo; ya que perdieron el paso firme que tenían en el torneo donde habían ganado todos sus encuentros desde el arranque del Apertura.
Pero la historia en Libertadores siempre es diferente: el oro y carbón llegó a la final de la Copa Libertadores en el 2011 y cayeron contra el Santos de Neymar, en ese entonces también eran dirigidos por Diego Aguirre; desde ese año hasta la actualidad el equipo no ha avanzado de la fase de grupos en 8 participaciones, por eso esta edición es más que importante para ellos porque primero intentarán avanzar de ronda y luego conseguir su título número 6 en el torneo de clubes más importante del continente.
Finalmente, Liverpool llega con la ficha del campeón uruguayo, pero luego de las bajas de jugadores importantes se desinfló un poco y le ha costado mucho ganar, hasta ahora no ha podido sumar de a tres en el Apertura y tiene 4 empates y dos derrotas que lo colocan en la posición once con 4 puntos.
Los “negriazules” reciben en su primer encuentro al complicado Independiente del Valle de Ecuador, este partido será el jueves en el estadio Centenario a las 21 horas. El resto de este grupo que es el F lo integran el poderoso Palmeiras de Brasil y San Lorenzo de Argentina.
Esta será su cuarta participación en el certamen en las anteriores se quedó en fase de grupos en los años 2011 y 2023, mientras que en el año 2021 no avanzó de la fase 1. Ahora Liverpool busca de cualquier manera romper la historia en su complicado grupo.
Para Liverpool es una misión imposible. Desmanteló el plantel con al ida de 12 o 13 jugadores y la ida de su DT. Armó un plantel nuevo que aún no se transforma en equipo con un DT también nuevo que aún no le encuentra la vuelta. Y le tocó el grupo más difícil. Lo único positivo serán los ingresos en moneda contante y sonante, sobre todo para un club saneado y bien administrado. Para los grandes la cosa es fulera también. Reciben dinero que ya tienen gastado, algo habitual en Peñarol y Nacional. Y les tocan series difíciel, con dos claros favoritos, unos de Brasil y otro de Argentina, viajes lejos frente a equipos venezolanos que ya no son aquellos que se comían goleadas estrepitosas y dos rivales directos, Rosario Central y Libertad. Y es notorio ver cómo a los grandes de acá les cuesta jugar contra equipos profesionales en serio…En el horizonte, el consuelo de por lo menos ir a la Sudamericana…