Cinco médicos odontólogos radicados en distintos puntos del país recibieron condena por la Justicia luego de que se les comprobara el delito de receptación por adquirir insumos médicos que ingresaron al país por contrabando.
La investigación de las autoridades recibió el nombre de “forceps” e inició en 2019, una vez que la Cámara Dental del Uruguay denunciara la comercialización por redes sociales de materiales médicos que ingresaban al país en infracción aduanera. En ese momento las autoridades identificaron a un uruguayo de 58 años que vivía en Rivera como el responsable de ofrecer los productos por redes sociales para que, una vez que se concretara el negocio, enviar los productos por encomienda.
En una primera instancia, la Policía logró detener ala hermana del indagado, una mujer de 49 años de edad que trabajaba con este. La Justicia dictó condena para esta por un delito de ofrecimiento comercial o venta de sustancias genuinas por personas inhabilitadas para ello y la sentenció a 24 meses de prisión en régimen de libertad a prueba.
El hombre, al saberse buscado por las autoridades, se mudó a la ciudad de Santana do Livramento. No obstante, las autoridades uruguaya hicieron trámites ante la Interpol de Brasil que permitieron la detención y extradición del sujeto en octubre de 2022. En ese momento recibió condena por el mismo delito que su hermana con la misma pena, con la diferencia de que los primeros ocho meses fueron de prisión efectiva.
Médicos detenidos y condenados
El trabajo de investigación de las autoridades llevó con la detección de diversos odontólogos compradores de los materiales contrabandeados. Es así como las autoridades realizaron cinco allanamientos en los departamentos de Montevideo, Paysandú y Río Negro.
En Montevideo se allanaron consultorios odontológicos en las calles San Martín y Colorado, Bulevar Artigas y Rivera y Bulevar Artigas y 8 de octubre. Allí fueron detenidas tres personas de 39, 49 y 63 años.
Por otro lado, en Paysandú detuvieron a una mujer de 55 años que trabajaba sobre la calle Dr. Verocay y en Young (Río Negro) aprehendieron a una mujer de 40 años que trabajaba en una vivienda ubicada sobre la calle Vasco Núñez.
A la última detenida la condenaron a 10 meses de prisión por un delito continuado de receptación. Para los otros cuatro formalizados la pena fue también de 10 meses de prisión, pero en régimen de libertad a prueba.
La Policía aclaró que aún falta por detener al hijo del hombre de 58 años condenado, el cual vive en Brasil.
