El Hospital Pereira Rossell postergó la vacunación contra el covid-19 para niños debido a que el 30 de abril se vencieron 79.000 dosis.
En estos casos lo que se hace es que el Ministerio de Salud negocia con el laboratorio Pfizer, que es el proveedor de las vacunas, para que se extiendan los plazos de vencimientos.
Álvaro Galiana, director del Pereira Rossell, , dijo que «las vacunas de Pfizer que han venido siempre han tenido inicialmente un plazo corto de vencimiento y paulatinamente, cada seis meses, se hacen reevaluaciones de la inmunogenicidad (capacidad para generar respuestas inmunes) de esa vacuna y se ve si se mantiene su inmunogenicidad y se ha extendido».
«Con las vacunas pediátricas que han vencido a fines de abril, entre mayo y junio a lo sumo julio se resuelva y el laboratorio nos dé el ok para continuar el uso de esas vacunas en niños», agregó.
En esa misma linea aseguró que «nunca las vacunas, aun vencidas, implican riesgos cuando se administran».
