El 2025 inició con la característica de que el actual gobierno entró en su cierre de gestión, mientras el entrante está armando sus filas. Es sabido que los ministerios que ya tienen definidos sus titulares iniciaron un proceso de transición, siendo uno de ellos el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). En este marco Diario La R habló con el Director Nacional de Trabajo, Federico Daverede quien analizó el pasaje de esta administración por la cartera.
Durante este período de gobierno el país enfrentó la época de pandemia donde destaca que el MTSS tuvo un «rol fundamental para darle contención, sobre todo, a los trabajadores, mediante herramientas como los seguros especiales». Esto provocó la «particularidad» de que hubieran tres rondas de Consejos de Salarios, siendo la primera «asignada por la pandemia y una solución especial que se encontró a esa situación era generar un período puente en donde se negoció en las mesas de rama y no se abrieron los subgrupos». Normalmente en las reuniones negocian aproximadamente unas 180 mesas, pero en esa circunstancia fueron únicamente 24 grupos.
La forma de trabajar y los resultados demostraron la «madurez del sistema y de las relaciones laborales en el país», recordando que por primera vez, desde el PIT-CNT se planteó la posibilidad de negociar de esta manera, «porque ellos también estaban condicionados».
Luego se suscitaron dos rondas más, en las que se concluyeron que «hay que mejorar el sistema en algunos aspectos», explicando que «ha ido quedando un poco rezagada aquella ley disparadora 10.449 del año 1943, que fue modificada por la 18.566, pero que aún requiere aggiornar el mundo de los consejos de salarios».
En este sentido destaca que son «un excelente instrumento» pero «con grandes carencias». Lo primero a analizar, entiende que es «si hay que seguir luchando por rama de actividad o por empresa. Hoy negociamos por rama de actividad y eso empuja a que muchas empresas dentro de la misma rama tengan enormes problemas para pagar todo lo que se lauda». Además, «hay que tener en cuenta las nuevas formas de hacer trabajo y las otras que se van a ir incorporando producto del avance tecnológico».
Daverede resaltó que también, «ha sido un ministerio de puertas abiertas con todos los actores que están directamente involucrados en el mundo laboral en Uruguay. Un camino heredado de la anterior administración y que esperamos se continúe en la entrante».
Al asumir en 2020, se pusieron como meta «poner en el mundo las relaciones laborales dentro de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), como, lo llamamos conceptualmente, el péndulo al medio». En ese sentido explicó que, basado en lo que dice la Ley de Negociación Colectiva, exceptuando la parte de los Consejos de Salarios donde interviene el Ministerio y el Poder Ejecutivo, la cartera actúa como mediador o conciliador «sin apartarse de los principios de neutralidad».
En cada situación que la cartera debió mediar, «logramos pararnos en el medio de las partes, para equilibrar el mundo de las relaciones laborales. Acá no se viene a tomar partido por ninguna de las dos partes”, si bien entiende que «no es una ciencia exacta» aclara que «uno lo va percibiendo de las partes, que ha hecho una buena gestión en ese sentido».
«Esta forma de gestionar es la que la Dirección de Trabajo debería seguir adelante porque así lo manda la ley», pero además, es lo que «termina de dar garantías a las partes y de afianzar la intervención de la cartera». Para Daverede «ante un conflicto laboral, que siempre existió y va a seguir haciéndolo, hay que saber administrarlos y resolverlos de la mejor manera, sobre todo porque son relaciones que cuando termine el conflicto laboral van a continuar y si esa relación continúa en conflicto se termina desgastando».
Agregó que otra de las «grandes características que signan la gestión de este ministerio que empezó con Pablo Mieres y que continúa hasta el 28 de febrero con Mario Arizti, es la estabilidad interna en todos sus directorios». En este marco destacó que «desde el inicio hasta el final los directores han permanecido en sus cargos», entendiendo que «eso también repercute en la gestión».
Sobre la situación laboral a nivel nacional, indicó «hay récord de gente trabajando. Se generaron nuevos nuevos trabajos y hay un buen promedio salarial que ingresa por hogar». Sostuvo que el gobierno entrante va a recibir el país «muchísimo mejor de lo que lo recibimos nosotros». Sin embargo, el director nacional de trabajo aclara que «es cierto que está en el debe, esa correlación que hay entre el salario y el costo de vida, pero el país está encaminado».
Reducción de la jornada laboral: «Sí pero con cuidado»
Uno de los temas que ha venido resonando es la posibilidad de reducir la jornada laboral, tema sobre el que le consultamos y admitió que «es algo que puede suceder», pero analiza que «hay que tener mucho cuidado en cómo se implementa». Daverede estudia que primero y en concordancia con el gobierno entrante, «no puedo hacer una ley de reducción de la jornada laboral para todos», sino que «hay que ir más al mundo de consejos de salarios, en donde los convenios colectivos impliquen en qué sectores se puede implementar, cuál es la forma y la cadencia».
En segunda instancia introduce la discusión sobre «productividad» como uno de los elementos que debe acompañar la reducción de la jornada. Concepto que en el país tiene un «atraso enorme». La actual administración del MTSS, «trató de poner en discusión el tema de la productividad y se ha avanzado hacia un documento» pero lamenta que «recién logramos ponernos de acuerdo en la definición de productividad», quedando mucho para discutir con las próximas autoridades.
En último lugar, pero no menos importante, informa que «hay que tener cuidado, porque esto choca un poco con el discurso de los ’veinticinco mil pesistas’ y puede tener dos consecuencias nefastas para estos trabajadores. Primero, que están en la línea de vulnerabilidad de poder ser despedidos y de tercerizar este servicio y segundo, esos trabajadores, porque naturalmente uno también lo haría así y ya sucede. Por ejemplo en enfermería, van a salir a conseguir otro trabajo, entonces en vez de trabajar una jornada reducida de seis horas, trabajarán 12 horas».
Transición «fluída»
Consultado por el trabajo que realizan con la administración entrante, Daverede informó que a su entender, viene siendo «fluido». La primera instancia se llevó a cabo en diciembre de 2024 con las autoridades designadas hasta entonces y, luego, las distintas direcciones iniciaron su proceso. Por su parte, la Dirección Nacional de Trabajo, se reunió con la directora entrante, Marcela Barrios y le hicieron entrega de información. En ese sentido, anuncia que en los primeros días de febrero habrá otra ocasión para seguir «evacuando las dudas que son lógicas en una transición» y se espera que le continúen otras hasta la asunción.
En la agenda del ministro del MTSS designado, Juan Castillo, estuvo presente una reunión con la Confederación de Cámaras Empresariales, cuyo presidente, Diego O’Neill, marcó como «positiva», pero a la espera de qué puede surgir de la revisión de la Ley de Urgente Consideración (LUC), que la administración entrante va a realizar.
Ante esta situación, Daverede recordó que la LUC en el mundo de las relaciones laborales «tiene simplemente cuatro artículos: uno sobre el derecho al trabajador de ingresar al local cuando hay huelga y otros tres en relación al piquete’’. En cuanto al derecho, informó que «no fue antojo del gobierno de turno», sino que «es lo que dice la Organización Internacional del Trabajo (OIT)». Explica que «había que corregir una situación jurídica que contravenía los convenios de la OIT de los cuales Uruguay es parte».
Referente a los piquetes y la libre circulación, «esta administración no ha hecho ni más ni menos que respetar ambos derechos sin poner prioridad por uno o por otro». Concluyendo entonces, que «hay una equiparación de derechos a través de estos artículos, con lo cual nosotros no vemos con buenos ojos que se quieran derogar».