De acuerdo con las palabras dichas por el abogado de la víctima, Marcos Pacheco, el incidente ocurrió afuera de la vivienda del hombre, en el barrio Goes. El defensor contó que el hombre salió del inmueble y en ese momento un patrullero se estacionó mientras los agentes le comunicaban a la persona que había una denuncia por atentado violento al pudor en su contra.
Aunque se desconocen los detalles, se estima que el hombre se resistió al arresto. Ante esta situación los funcionarios comenzaron a golpearlo hasta el punto de dejarlo gravemente herido. Al ver el estado en el que estaba la víctima, los policías decidieron montarla a en el patrullero y trasladarla hasta la policlínica de Capitán Tula, donde finalmente no recibió atención médica.
Pacheco contó que actualmente la víctima está internada en un centro de salud privado del cual no es socio. Asimismo, indicó que su estado es de muerte cerebral y que estiman que en las próximas horas morirá.
El parte policial indica que los agentes detuvieron al hombre, pero que luego de unas horas lo dejaron en libertad. Ante esta situación, el abogado cree que no existió tal denuncia por la que aprehendieron a la víctima. Sin embargo, se mostró cauto y dijo que es algo que las autoridades deberán investigar.
Pacheco contó que ya se radicó una denuncia ante el departamento de Asuntos Internos y otra más ante la Fiscalía. No obstante, destacó que los denunciantes tienen problemas debido a la falta de testigos del incidente, por esta razón los familiares buscan a quienes pudieron presenciar el hecho para que estos puedan ayudar a las autoridades.
