Los últimos sucesos vienen desencadenando en CASMU un efecto de graves situaciones que no son ajenas a los usuarios ,empleados ,médicos y directivos.
Desde la expulsión del doctor Álvaro Niggemeyer a la fecha han pasado numerosas situaciones en donde CASMU ha incurrido en errores y horrores.
Con una conducción ultra presidencialista donde la figura desde lo estatutario del vicepresidente es casi no decisoria y la secretaria general es manejada en línea ciega con el presidente permiten ser el cóctel perfecto para caer en muchos errores de gestión y administración.
Recordando al triste presidente argentino Carlos Menen que decía «están conmigo o sinmigo» el Dr Rodriguez administra la institución tal cual patrón de estancia feudal del 1815 y emula esa conducción podríamos decir menemista.
El parte de la base que la prensa es comprable y desde allí maneja un error conceptual ya que la prensa no es comprable los que se dejan comprar son los hombres y mujeres.
Ese estilo ha llevado a una constante confrontación de CASMU con instituciones, sindicatos, gremios profesionales, trabajadores, políticos, proveedores y el MSP como con quienes lo condujeron y conducen.
Los procesos internos se vieron plagados de contextos externos a la función que es el concepto de quienes responden al presidente suman a el equipo, quienes no a la Siberia.
La desprolijidad administrativa y los pasos no estudiados como lo mediático de su presidente han llevado a un brete financiero tal cual callejón con salida pero muy cara para el pueblo uruguayo.
Hay una frase del contador Damiani que decía que – no mienten los números, los que mienten son los que lo hacen.
Bueno, CASMU carece de una capacidad de autocrítica supina ya que todos están contra CASMU y solo yo sé cuál sería el criterio sanador.
Ahora el cuestionamiento es decir CASMU es el Dr. Raúl Rodriguez o el representa a los médicos capitalizadores de la institución.
Esa línea conductista acompañada de una mega gerencia extendida en exageración es lo más parecido a un empleo del estado de 1970.
Mover al CASMU es como mover un elefante en un bazar, este paquidermo empresarial es movido en momentos en patines y rompe las aristas de la estructura o en una tortuga que desespera ver el mal servicio por lo lento.
Nada es ajeno a nadie en principio a los usuarios.
Meses atrás con la intervención ya puerta adentro fuimos invitados a ser parte de una denuncia de acción de prensa contra los interventores en donde no se justificaba en sí la denuncia que se nos informaba debíamos comunicar.
Ante el hecho de no tener los argumentos probatorios no nos hicimos eco periodístico de la noticia.
Era exponer que uno de los interventores aconsejaba vender un inmueble de CASMU a otra mutualista de plaza, según CASMU.
Luego vinieron presiones en lo económico para después ser declarados nuestro medio de no confianza del presidente.
Otros sucesos sumaron tensión a los hechos,hasta llegar al acontecimiento trágico que acabó con la vida de Milagros Chamorro usuaria del CASMU.
Situación que dejó sin palabras a la sociedad uruguaya y al sistema de salud propio de CASMU en donde todo hace pensar en fallas de protocolo que permitieron este desenlace tristísimo.
La política del silencio no aplica para nosotros y pusimos en conocimiento las acciones y hechos que no van con nuestra manera de manejarnos en la vida, por lo tanto detallamos a las autoridades toda la información que creíamos debíamos volcar para dar luz a los hechos que denunciamos.
Somos socios de CASMU y conocemos la conducción de CASMU desde la presidencia actual.
Estuvimos en la mesa de crisis de finales del 2023 de la institución contratados y asesoramos desde de la verdad como comunicar de manera veraz y profesional las virtudes de CASMU en servicios.
Estos sucesos que narramos finalmente no nos permitió seguir adelante con un postulado de trabajo que es el conducir información veraz y seria para mejorar la institución.
Todo caía en informar en el último tiempo en victimizarse y sostener la imagen presidencialista como la salvadora de CASMU.
Tomamos la mejor decisión estar del lado de CASMU y no de quien dirige CASMU.
Como dijo la ministra de Salud en conferencia con la prensa , la verdad dirá donde está la razón.
