Dentro de sus principales funciones, se encuentran las de ejecutar los monitoreos que permiten evaluar la aptitud para baños de las playas y realizar advertencias sanitarias a la población cuando corresponda.
Como eje transversal a estas actividades, permanentemente se generan oportunidades de intercambio y fortalecimiento técnico entre las instituciones participantes. Uno de los puntos clave de estas instancias es trabajar en la homogeneización y protocolización de criterios a nivel nacional, en base a los cuales se monitorea y se generan las advertencias sanitarias.
Esta temática se aborda de diferentes maneras; por un lado trabajando activamente con los técnicos de las intendencias, acordando los protocolos de acción.
Por otra parte se capacita al personal designado por las intendencias, principalmente guardavidas, pero también inspectores, guardaparques y voluntarios, para tomar las decisiones sobre la colocación de señales de advertencia (ej. bandera sanitaria) en las playas. Y otro abordaje comenzó a darse a partir de 2019, capacitando a los estudiantes de la carrera de guardavidas del ISEF (Figura 3), a través de un convenio de cooperación entre la UDELAR-ISEF y el MA-DINACEA.
En este marco se brindan talleres sobre floraciones de cianobacterias y otros eventos de riesgo sanitario en playas, a fin de que los y las futuros guardavidas egresen con información acreditada en estos temas de relevancia para su actividad profesional.
En cuanto a las actividades de monitoreo, los responsables de llevarlas adelante son los técnicos de las intendencias participantes, siguiendo los protocolos de trabajo elaborados por la RMP. La información obtenida se centraliza a través del Sistema de Información Ambiental (SIA) y se disponibiliza en el Observatorio Ambiental Nacional (OAN) en las secciones “Datos abiertos” y “Geoportal”, del MA. Adicionalmente se realizan informes anuales, que se encuentran disponibles en la sección “Documentos” del OAN) y en la sección “Calidad Ambiental y Análisis” de la web del MA.