La representación permanente iraní ante los organismos de la ONU con sede en Viena ha subrayado que «todo el material nuclear y todas las actividades nucleares (iraníes) están sujetas a una estricta supervisión y verificación del OIEA» y ha destacado la «transparencia» y la «cooperación» de las autoridades iraníes. «No tiene cabida cuestionar la naturaleza pacífica del programa nuclear de Irán», ha remachado.
El pasado lunes el director general del OIEA, Rafael Grossi, alertaba de que hasta ahora Irán sólo ha cumplido con «una fracción» de los requisitos sobre inspección nuclear pactados entre las partes en marzo e indicaba que aún hay asuntos sobre los que Teherán no ha dado explicaciones a la agencia.
En respuesta, Teherán ha señalado que las denuncias sobre las «tres ubicaciones» nucleares a las que se refiere el OIEA parten de «información falsificada de una tercera parte» y menciona concretamente a la «entidad israelí», país que «no es firmante de ningún acuerdo sobre armas de destrucción masiva, incluido el Tratado de No Proliferación Nuclear».
«La mera presencia de partículas de uranio de bajo enriquecimiento en estos lugares no se puede considerar como presencia material nuclear contaminado», ha argumentado Irán. «El Organismo no ha presentado a Irán ningún documento importante que demuestre sus acusaciones», ha remachado.
Las conversaciones para la restauración del acuerdo nuclear de 2015, gravemente dañado por la decisión de Estados Unidos de retirarse del mismo de forma unilateral en 2018 denunciando supuestos incumplimientos por parte de Teherán, llevan meses estancadas.
