La Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa) alertó que casi un millón de personas desplazadas en Gaza están en grave riesgo debido a la llegada del invierno. La organización destacó que las personas desplazadas necesitan protección urgente contra las lluvias y el frío, pero que solo se ha cubierto alrededor del 23% de sus necesidades.
A través de su cuenta en la red social X, Unrwa hizo un llamado a la comunidad internacional para donar fondos y ayudar a los dos millones de palestinos que viven en Gaza, una región que lleva más de 14 meses bajo ataques del ejército israelí. La agencia subrayó la creciente urgencia de la situación y la necesidad de una respuesta inmediata ante el empeoramiento de la crisis.
El Comité Internacional de Rescate (IRC) también advirtió que la llegada del invierno y las fuertes lluvias han agravado aún más la situación humanitaria en Gaza. Las inundaciones severas, sumadas a las bajas temperaturas, están afectando especialmente a las familias desplazadas que se alojan en tiendas de campaña, sin refugio adecuado ni ropa térmica para hacer frente al frío. Además, las restricciones militares a la entrada de combustible en la franja de Gaza empeoran la situación.
Bart Witteveen, director del IRC para los territorios palestinos, destacó que sin acciones inmediatas, millones de personas, en particular niños, mujeres embarazadas y ancianos, continuarán sufriendo consecuencias catastróficas debido a la falta de recursos y condiciones de vida extremas.
