El presidente de la República, Luis Lacalle Pou se refirió al tema de la seguridad, tras la comparecencia del Ministro del Interior, Nicolás Martinelli al Parlamento.
Lacalle Pou dijo que “el tema de la seguridad pública es preocupación de los uruguayos y, por ende, del gobierno” y dijo que “los homicidios han bajado”, si se comparan las cifras de 2023 con 2022 y 2019. No obstante sostuvo «hoy, el Uruguay se levantó con la muerte de un niño de 8 años. No se puede estar conforme y no se puede resignar uno a que la violencia sea el mecanismo normal de relacionamiento de los uruguayos”. “Los números, en cuanto a la baja de delitos, son buenos, pero estamos hablando de gente, entonces cuando las cifras las pasás a gente, cuando pasa este tipo de cosas es realmente lamentable”, acotó.
El primer mandatario recordó que «la gente del observatorio es la misma que cuando estaba el Frente Amplio. En campaña nunca dijimos, como dijo un candidato en su momento que iban a bajar 30% las rapiñas y los hurtos; increíblemente no lo dijimos pero está pasando en nuestro gobierno».
Lacalle Pou sostuvo que el gobierno “va a seguir haciendo el mismo trabajo” en materia de seguriidad. Al ser consultado sobre la la propuesta del senador y Jorge Gandini, para que militares participen de un patrullaje junto a la policía dijo que «será un tema de campaña electoral» ya que «en principio, la ley nos habilita a la utilización de los cuerpos de la policía”.
«Represión era mala palabra»
En su comparecencia ante el Parlamento, el ministro del Interior, Nicolás Martinelli dijo «recibimos el año 2019 con un promedio de 340, 360 bocas desarticuladas por año, y hoy estamos desarticulando más de 1.000 bocas por año”. Agregó que cuando aumió el gobierno se realizaban 820 allanamientos por año «y estamos cerrando con más de 2.000 allanamientos por año”.
En una parte de su intervención, Martinelli dijo que “bien intencionado, el gobierno de turno del Frente Amplio en aquel momento decide empezar a trabajar en una política más focalizada en el abordaje de las causas, de prevención; pero como para los gobernantes de aquel momento ‘represión era mala palabra’, dejaron de lado este otro pilar, bien importante”.
En materia de datos, el año pasado hubo 383 asesinatos, igual cifra que 2022. Las rapiñas fueron 22.390 o sea 61 por día, casi 3 por hora. Esta cifra es un 4,5% menos que en 2022, cuando se llegó a 23.427.
Los hurtos se ubicaron en 115.833, 317 por día o 13 por hora. En 2022 habían alcanzado los 115.883. Por su parte, bajaron de 23.427 en 2022 a 22.390 en 2023 (una contracción de 4,5%), al tiempo que los hurtos también descendieron de 115.883 a 112.747 (2,8% de caída).
Por su paret hizo erferencia a la propuesta de la participación de los militares en la seguridad interna. Al respecto dijo en conferencia de prensa que “la Guardia Republicana entra a cualquier barrio del territorio nacional. Con la fuerza policial que tenemos, con el equipamiento y entrenamiento de la Guardia Republicana, no sería necesario contar con apoyos por parte del Ministerio de Defensa”.
Programa de prevención de homicidios
Durante la comparecencia nate el Parlamento, el coordinador de Estrategias de Prevención Policial del Delito, Diego Sanjurjo, dijo que se contratará a dos ONGs para trabajar con el programa de prevención de homicidios de International Cure Violence. Trabajarán en Peñarol, Casavalle, Manga, Marconi, Las Acacias y Villa Española y otro grupo en Casabó, La Paloma, La Teja, Tres Ombúes y Cerro Norte.
El programa «busca detener e interrumpir potenciales situaciones de violencia, a través de referentes locales, identificando a personas de alto riesgo y buscando cambiar normas de convivencia».
Otro cómico. Se bajó de la moto un ratito para hablar con la prensa. Mientras Martinelli pontificaba acerca de «la seguridad» que brinda el Ministerio del Interior, morían el hijo y el hermano de un narco. Eso sí, el Ministro está contento porque los muertos son sólo en los barrios marginales. Y la víctima de 8 años no era un niño, era un menor. Y nobleza obliga, entre tantas inauguraciones, charlas con la prensa y paseos en moto al presidente no le queda tiempo para gobernar.