En un nuevo episodio de censura educativa, algunas escuelas de Estados Unidos han decidido prohibir la lectura de “Cien años de soledad”, la obra maestra de Gabriel García Márquez, uno de los escritores más influyentes de la literatura latinoamericana y universal. La decisión ha generado debate sobre los límites de la educación y la libertad intelectual en el sistema escolar estadounidense.
Según los informes, la prohibición responde a preocupaciones sobre contenido sexual, lenguaje explícito y referencias a drogas, lo que ha llevado a que los administradores escolares retiren la novela de los planes de estudio y las bibliotecas. Para muchos docentes y especialistas en literatura, esta medida limita la capacidad de los estudiantes de explorar obras literarias clásicas y de comprender la riqueza cultural de América Latina.
La decisión ha sido interpretada por críticos como parte de un patrón más amplio de censura que afecta a libros de autores diversos, especialmente aquellos que abordan temas de sexualidad, política o diversidad cultural. En el caso de García Márquez, se trata de borrar del aula una obra que combina realismo mágico, historia social y reflexión sobre la condición humana.
Organizaciones de escritores y académicos han expresado su rechazo, destacando que “Cien años de soledad” no solo es una obra literaria, sino un patrimonio cultural que ayuda a los jóvenes a pensar críticamente y a acercarse a otras realidades y culturas.
La prohibición abre un debate más amplio sobre la educación en Estados Unidos y la forma en que se seleccionan los contenidos escolares, planteando preguntas sobre quién decide qué se puede leer y qué no, y sobre el impacto que estas decisiones tienen en la formación intelectual de los estudiantes.
Mientras tanto, García Márquez, galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 1982, continúa siendo un símbolo de la literatura universal, recordando que las grandes obras no solo deben leerse, sino también debatirse y enseñarse.
Es la máxima que guía a los censores, burros todos ellos. Si no lo entienden, prohíbanlo por las dudas. Que dos obras maestras como «Cien años de soledad» y «El amor en los tiempos del cólera» sean prohibidas define claramente la capacidad mental del censor. Tiene todo el derecho del mundo a decir esto no me gusta, pero es imposible negar la calidad literaria de estas dos novelas. ¿Contenido sexual, lenguaje explícito, drogas? En todo caso, tendría que empezar por leer, porque es evidente que no tiene idea de lo que está hablando.
«En tiempos de engaño universal, decir la verdad es un acto revolucionario.» George Orwell